Desde el comienzo de la epidemia se contabilizaron más de 2.033.620 casos de contagio en 193 países o territorios. La cifra de casos diagnosticados positivos sólo refleja sin embargo una parte de la totalidad de contagios debido a las políticas dispares de los diferentes países para diagnosticar los casos, algunos sólo lo hacen con aquellas personas que necesitan una hospitalización.
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Las autoridades consideran que hasta ahora, al menos 436.100 personas se curaron de la enfermedad.
Ahora bien, expertos acaban de descubrir en plena crisis por el COVID-19, seis nuevos tipos de coronavirus en los murciélagos de Myanmar.
Como ya se ha dicho en muchas ocasiones, los murciélagos son los principales sospechosos de haber iniciado con la pandemia del coronavirus COVID-19, que hoy tiene de rodillas al mundo.
Ha sido el Instituto Smithsonian de Estados Unidos, que ha revelado el descubrimiento de seis nuevos tipos de coronavirus, que han especificado que no tienen mucho que ver con otros coronavirus conocidos como el SARS, el MERS o el COVID-19.
La capacidad de estos nuevos virus para expandirse y para hacer daño al ser humano es todavía desconocida, por lo que se hará nuevos estudios.
LOS NUEVOS VIRUS
La revista Plos One ha sido quien publicó el descubrimiento de los seis nuevos tipos de coronavirus, que parece debe preocupar a los expertos.
Los virus fueron hallados en tres tipos distintos de mamíferos alados: el doméstico amarillo asiático mayor (Scotophilus heathii), donde se encontró el PREDICT-CoV-90; el cola libre de labios arrugados (Chaerephon plicatus), donde aparecieron las cepas PREDICT-CoV-47 y -82; y el nariz de hoja de Horsfield (Hipposideros larvatus), con tres cepas distintas, las PREDICT-CoV-92, -93 y -96.
Hay que recordar que fue en China donde se inició el COVID-19. La venta de murciélagos como mascotas o alimento, es algo normal en dicho país asiático.
EXPUESTOS A LAS PANDEMIAS
Marc Valitutto, principal descubridor de las seis nuevas cepas, recordó lo expuesta que está la raza humana a pandemias como la que se está viviendo en la actualidad.'Las pandemias virales nos recuerdan lo estrechamente que está conectada la salud humana con la salud de la vida silvestre y el medio ambiente. En todo el mundo, los humanos interactúan con la vida silvestre con mayor frecuencia, por lo que cuanto más comprendamos acerca de estos virus en los animales, lo que les permite mutar y cómo se propagan a otras especies, mejor podremos reducir su potencial pandémico', expresó.
