En este sentido, Snapchat fue una de las primeras de las primeras aplicaciones sociales que incorporó una función que alertaba al usuario de que otro había hecho una captura de pantalla. Es cierto que no evitaba la captura, pero el rubor de saber que le habían pillado a uno inmortalizando una foto efímera era todavía peor.
Hecha la ley, hecha la trampa. Circula ya por internet una guía mediante la cual se puede burlar esta alerta de Snapchat y de una manera relativamente sencilla, además. Para ello, hay que seguir los siguientes pasos:
- Abrir Snapchat y descargar las fotos sin llegar a abrirlas (basta con pulsar sobre el icono de la foto, pero no sobre el nombre).
- Poner el celular en “modo avión” momentáneamente.
- Abrir el Snap descargado (aparecerá la fotografía en cuestión).
- Hacer la captura.
- Cerrar la aplicación (asegurarse de que se cierra por completo y no se está ejecutando en segundo plano).
- Desactivar el “modo avión”.