La Selección
2010-07-29
Nuevo proceso, nuevos objetivos y nuevas caras.
Los objetivos que el fútbol hondureño se debe de plantear de ahora en adelante son diversos, van desde la consolidación de las nuevas joyas hasta recobrar el dominio de Centroamérica, algo que pese a que muchos consideran a Honduras como el mejor conjunto del área, el que más jugadores exporta al exterior y con una liga competitiva, no se ha conseguido en los últimos años.
Si bien los pasados 24 meses han sido exitosos en cuanto a objetivos alcanzados, tres Mundiales, dos juveniles y un adulto y la clasificación a Juegos Olímpicos, el conformismo no debe tener cabida tanto en directivos, cuerpo técnico y jugadores. Las metas propuestas a partir de este día deben potencializarse y ver con positivismo el futuro.
GANAR LA COPA UNCAF
Este torneo se le dificulta mucho a Honduras, ni siendo sede hemos sido capaces de ganarlo, aunque como descargo se podría argumentar que casi siempre acudimos al certamen con un equipo B conformado por jugadores de la Liga reforzado por una que otra figura.
De las 10 ediciones que lleva de historia el torneo, la Bicolor se ha coronado en apenas dos de ellas, la primera en 1993 y la última en 1995 en El Salvador, cuando en la final se venció 3-0 a Guatemala con goles de Milton “Tyson” Núñez y Carlos Pavón en dos ocasiones.
Desde entonces, apenas logramos ser subcampeones en 2005 cuando campeonizó Costa Rica. Hemos albergado el torneo en tres ocasiones, en 2009 en Tegucigalpa acabamos en la tercera posición. El próximo certamen será el 2011 en Panamá.
ASISTIR A UNA CONFEDERACIONES
Uno de los grandes objetivos del próximo director técnico es grande, no sólo porque se trata de un torneo del área.
La Copa Oro que se disputará en junio del próximo año debe asumirse con todas las de la ley, con la idea de ganarla a como dé lugar, ya que eso nos daría el boleto directo a la Copa Confederaciones a realizarse en Brasil en 2013.
Debe crear un grupo capaz de imponerse y superar la barrera de las semifinales que en las últimas ediciones nos ha impedido llegar más lejos. En 1991 en la primera edición de este torneo, fue cuando estuvimos más cerca de campeonizar, caímos en penales en la gran final ante Estados Unidos.
BRILLAR EN LOS JUEGOS OLÍMPICOS
Al igual que el proceso anterior, la Selección Sub-23 que competirá por lograr un boleto a Londres 2012, deberá clasificarse y mejorar el papel hecho en las dos presentaciones hondureñas en esta competencia, en Sydney 2000 se lograron cuatro puntos y fuimos terceros de nuestro grupo, donde clasificaron Italia y Nigeria.
En cambio en Beijing 2008, hicimos el ridículo al perder ante Italia, Camerún y Corea del Sur. El objetivo es mejorar lo hecho en ambas ocasiones. El entrenador del conjunto nacional adulto deberá supervisar los trabajos de este equipo y en caso de no coincidir con el calendario de eliminatorias o compromisos en fecha Fifa, debería estar al mando.
LLEGAR Y COMPETIR EN BRASIL 2014
La tarea que deberá asumir el nuevo seleccionador será guiar a Honduras a su tercera Copa Mundial sin sobresaltos, sin sufrir hasta el último momento. A Sudáfrica 2010 fuimos por un milagro, por diferencias de goles y rezando hasta el último segundo.
La tarea del DT entrante será mantener la fortaleza como local que Rueda impuso en la Concacaf, perdiendo apenas un partido eliminatorio de nueve disputados, pero mejorar el balance como visitante, donde apenas se lograron cinco puntos de 27 posibles.
El elegido por la Fenafuth debe imponer un equilibrio al equipo tanto dentro como fuera de nuestras fronteras. Alcanzar el boleto a Brasil 2014 no bastará, se debe jugar el Mundial de buena manera y aspirar al máximo que nuestras posibilidades nos permitan. La cita con la historia se logrará si ganamos un juego, algo que en seis presentaciones aún no hacemos.
CONSOLIDAR LA NUEVA CAMADA
Por último, el estratega de la Bicolor deberá ser formador de categorías menores, dirigir y delegar funciones para buscar a los futuros seleccionados para seguir teniendo el éxito logrado en 2009, donde la Sub-17 y Sub-20 participaron en Copas Mundiales de su categoría.
Fortalecer y terminar de consolidar a las camadas mundialistas para que no pasen al olvido de manera fugaz, darles seguimiento y oportunidad cuando los compromisos del equipo de todos lo amerite.