2015-10-19
El anotar un gol es la emoción más grande que te puede dar el fútbol según los mismos deportistas, pero a veces la euforia les ha jugado una mala pasada a más de uno.
El hecho más reciente ocurrió este domingo en el fútbol hondureño, donde Kemsie Abbott, se paró en el cerco que divide la cancha con las graderías y la camisa se le quedó trabada en el alambre ciclón.
El hecho más reciente ocurrió este domingo en el fútbol hondureño, donde Kemsie Abbott, se paró en el cerco que divide la cancha con las graderías y la camisa se le quedó trabada en el alambre ciclón.
El jugador le pidió ayuda a los aficionados para que le bajaran la camiesta y pudiera seguir el juego en Tocoa.
Por eso en Diez te presentamos otros extraños casos de celebraciones accidentadas.