Liga Nacional

Doña Lidia Ramos, la abuelita futbolista que es sensación en Honduras

Tiene 56 años de edad y corre como una cipota. Vive en La Ceiba y es admiradora de Wilmer Crisanto del Motagua

2016-10-05

Sus siete hijos encabezados por Nory, Roque, Jeremías, Orlin, Olmin, Eily y Lizzy no son obstáculo para que doña Lidia Ramos Simeón siga jugando fútbol a sus 56 años de edad. Tampoco la diabetes, ni los 10 nietos han podido alejarla del deporte rey.

Doña Lidia nació el 24 de febrero de 1960 en La Másica, Cortés, después de la guerra contra El Salvador sus padres la llevaron a vivir a Tocoa con apenas nueva años de edad, con el paso del tiempo formó su propia familia que siempre la apoyan en las canchas y camerinos.

'Juego fútbol desde muy joven actualmente tengo 25 años de tener contacto con el balón, sólo paré a los 40 años porque fue para críar a mi última hija, pero he jugado constantamente durante todo ese tiempo. Este deporte me gusta mucho porque es muy sano y divertido', explicó.

Foto: Diez

Doña Lidia juega con el número que usa Carlo Costly y tiene 25 años de carrera.

Doña Lidia se declara admiradora de la futbolista brasileña Martha y el carrilero derecho de Motagua Wilmer Crisanto. Durante su experiencia en el fútbol ha jugado con los equipos Peñarol, Guapinol, Once Estrellas, Zamora, y Cayo Sierra, afiliados a la Liga Femenina de Tocoa, ganando seis títulos de campeón y cinco sub campeonatos.

'Al principio mucha gente se burlaba de mi cuando me miraban en la cancha por mi edad, ahora me admiran porque a través del ejercicio me mantengo relativamente saludable porque hace dos años me detectaron diabetes pero através del fútbol mantengo el nivel de azúcar en 108', indicó.

Y añadió. 'A las mujeres de mi edad les digo que practiquen fútbol o algún otro deporte porque es muy divertido y saludable, me gustaría que sigan mi ejemplo, juego con mis hijas y nietas, el fútbol es tradición en mi familia. Durante la semana entrenamos dos veces para llegar bien a los partidos los fines de semana'.

La increíble y emocionante historia de doña Lidia 'conocida como la abuelita del fútbol' es impresionate porque se gana la vida criando gallinas y bordando manteles para agenciarse algunos fondos, sin embargo para ella la pasión por el fútbol no conoce límites, sexos ni edades.

Foto: Diez

Corre como si tuviera 20 años y se quita las marcas porque es muy escurridiza.

'Me gustaría retirarme a los 60 años de edad, este deporte es mi pasión y sin él no puedo vivir, he jugado de portera, defensa y delantera, ahorita lo hago en la media cancha, pero he anotado 30 goles durante todo este tiempo', expresó.

'Mi esposo me apoya mucho, fue mi entrenador un tiempo pero no me gustaba como me trataba, me decía que ya estaba vieja y le respondía que viejo es el viento y todavía sopla, sin embargo siempre me apoya, mis hijas y vecinos también, todos están elegres porque dicen que soy un ejemplo a seguir'.

ADMIRA A WILMER CRISANTO

Previo al partido entre Motagua y Real Sociedad en el estadio Francisco Martínez de tocoa, Lidia cumplió uno de sus sueños al conocer peronalmente al defensa de Motagua y selección nacional, Wilmer Crisanto.

'Admiro a Wilmer Crisanto, es un buen jugador y me identifico mucho con él porque los dos somos laterales por la derecha, antes del partido Motagua -Real Sociedad en Tocoa le pedí un autográfo, fue muy amable conmigo, siempre le voy a agradecer ese gesto'.