En su visita a la redacción de Diario DIEZ responde preguntas de los aficionados. García era un desconocido pero con su trabajo ya tiene encaminado al equipo a las puertas de un nuevo título tras vencer 2-0 a Motagua.
¿Es normal que le digan Tato?
De chico me decían Tatín por Martín y cuando ya fui creciendo me quedé con Tato, así somos en Uruguay.
¿Pudo dormir tranquilo tras el triunfo?
Si porque estaba muy cansado sobre todo por el estrés de lo que significa el partido y uno trata de vivirlo porque lo vivo intensamente, quizá corro más que los jugadores. Cuando pongo la cabeza en la almohada pienso pero si llego muerto.
Usted es emotivo y lo expresa... ¿Es natural eso, cómo lo aprendió?
Lo hago inocente, son cosas que vive, lo hice como jugador pero sé que hay que bajar los decibeles pero bueno, siempre viví el futbol de la misma manera y en el costado de la cancha paso pendientes de los jugadores, de corregir algo para que no nos sorprendan pero siempre trato de mantener el respeto.
¿Le gusta la Navidad?
Me gustaba más de chico, después de que perdí a mi mamá me da tristeza, pero es para que los niños los disfruten.
¿Le pedía cosas a Santa Claus?
Yo a quien le pedía era a los Reyes Magos porque en Uruguay el regalo de papa Noel es chiquito, luego a los Reyes Magos si le pedíamos todos, lo mío eran zapatos de fútbol y la camisa de Peñarol. Mi hermano pedía autos o camiones.
¿Cómo pasó esta Navidad porque vino su esposa?
Cocinando, haciendo un poco de carne y pollo en la parrilla. También muy contento con la familia de Rafa Cano y uno que otro vecino que se cruzó.
¿Le regalaron tamales?
Sí claro, la esposa del vigilante que cuida la sede del equipo me regaló algunos.
¿Usted miró la película Mi Pobre Angelito? ¿Hizo alguna travesura así?
Si claro jaja. No sé si como las de Kevin, pero siempre fui complicado desde niño.
¿Se siente confiado con el 2-0?
No, falta todavía, no podemos vender la piel del oso antes de cazarlo, falta el partido de vuelta contra un gran rival, para mí Motagua es el mejor equipo de la liga, es muy ordenado pero vamos con mucha ilusión a Tegucigalpa para traer la Copa.
¿Jugará Cristhian Altamirano el sábado?
El tema del flaco Altamirano lo vamos a evaluar, está recuperado pero una final se juega muy intenso y vamos a ver.
Diego Vázquez es muy cabalístico, usted tiene alguna?
Tengo muchísimas, Omar Zalazar las descubrió y se reía mucho. Ahora le dijo a Rodrigo Castro y me las recuerda, pero no las voy a revelar. Trato de hacerlo siempre igual y hago algo en el vestuario que lo dejo allí y Omar lo saca, pero eso de echar cosas en el vestuario no.
¿Qué le cambió a Real España cuando llegó?
Encontramos un equipo muy golpeado, los encontramos anímicamente mal. En primer momento les di confianza porque soy muy exigente porque toda esa exigencia la pongo para el lado positivo. Tengo jugadores que me cuentan cosas como por ejemplo, ayer no dormí porque tenía el niño enfermo y cosas así, entonces le decimos al profe que no le exija tanto porque más que futbolistas son seres humanos. Soy frontal, digo las cosas de frente y todo esto nos ha llevado a hacer las cosas bien. Sería hipócrita decir que todos quieren a tato, no todos somos amigos, pero lo que si es que miro a todos iguales, no hay uno que diga este hay que cuidarlo porque es estrellita.
Un aficionado dice: Ojalá no venga a meter el bus a Tegucigalpa si no a proponer porque tenemos equipo
Nosotros no iremos a meter el bus, al contrario, nosotros vamos a ir a proponer el partido.
