Olimpia logró salir vivo de la caldera de Choluteca, se mantiene invicto al empatar 0-0 ante el aguerrido Necaxa en la fecha nueve del torneo Clausura de la Liga Nacional de Honduras.
Nada de intensidad, poco fútbol y el final como siempre, agotados, sin piernas, porque lo único que predominó fue una intensa calor de 35 grados, acostumbrado en esta ciudad del sur de Honduras.
Por el ambiente en Choluteca, por la euforia y la pasión que desata un partido de esta clase, se esperó un buen ritmo de partido, pero desde el primer minuto fue todo lo contrario.
Jugaron muy calculado, toque en el medio campo y adelante esperaron de alguna sorpresa o descuido de los zagueros para entrarle al partido, pero fue imposible romper esas murallas.
Se queda corto el juego ofensivo, demasiadas pierna, fuerzas y poco atrevimiento. Y habrán muchos calificativos, pero nada más habrá que cerrar un primer tiempo para las tajaditas y el refresco. El único sabor de un partido que pintaba para más.
¿Y qué pasó en el complemento? Apostaron por el 0-0, porque resulta que es lo más beneficioso en estos tiempos cuando vez que hace falta entrega y sudor para meter la pelota. En Necaxa hubo miedo para rematar al enemigo, Shanon quiso hacerlo con un disparo pero finalmente le salió muy tibio. Un caramelo para Donis.
Olimpia, por su parte, también se contagio, aún cuando en la banca habían hombres desequilibrantes como Will Mejía y Roger Rojas, Tosello sacó un equipo alternativo, con poco poder ofensivo.
Y ni aquel remate a los 77 minutos de Garrido con ayuda de los demás compañeros en ataque, pudieron clavar el esféricoal fondo de las redes. Necaxa se salvó, pero ni así hubo respuesta para sacarse ese orgullo.
En pocas palabras, lo único rescatable fue ese 0-0 que sirve para el invicto del Olimpia, que sigue líder con 20 puntos, y otro para el Necaxa en su afán de mantenerse en los primeros lugares, pues es tercero en la tabla con 13 unidades.