Liga Nacional

Rigoberto 'Shula” Gómez, de futbolista a pintor

El ex jugador de Olimpia recientemente fue jubilado en Estados Unidos.

2013-01-30

Está jubilado desde marzo de 2012, vive en Nueva York en donde lleva una vida tranquila después de pasar muchos años trabajando en una compañía pintando velos de novia.

Hablamos del ex jugador de Olimpia y la Selección Nacional de los años 70 y 80 Rigoberto “Shula” Gómez, quien era uno de esos delanteros centrales que le dio muchas glorias al fútbol catracho.

“La historia sobre mi niñez fue muy grandiosa, miré el fútbol, me fasciné por él y me dediqué a jugarlo porque crecí en dos barrios muy queridos de Tegucigalpa como La Concordia y El Chile”, afirma Gómez.

Vive solo en un apartamento en el Bronx, en la capital del mundo, donde atendió a DIEZ para contarnos su historia de vida en EUA.
Por qué le dicen “Shula”

“Este apodo me lo pusieron en la escuela Álvaro Contreras de Tegucigalpa. En mi niñez jugábamos la potra, había una profesora que siempre nos quitaba las pelotas de calcetín en el recreo. Una vez todos nos pusimos de acuerdo y llevábamos las pelotas de calcetín y cuando arribó la maestra del grado, tirábamos las bolas, yo me quedaba con la última y me ponía a bailar a la profesora, ella entonces llamó al profesor Santos, le dijo: Maestro Santos, este cipote me está “chuleando” y desde de allí fue que me clavaron Shula”, cuenta entre risas.

En el fútbol profesional hondureño, todo el tiempo militó en el Olimpia, al que le dio muchas glorias en los 70.

“Da la casualidad que llegué al Olimpia que tenía muchas estrellas y pensé: ¿A quién voy a suplir ? Y la oportunidad de ser titular me llegó en una Feria Juniana en San Pedro Sula y de allí me afiancé”, siguió contando.

“Shula” jugó 14 años con la camisa de los merengues, desde 1966 hasta que se despidió en 1980, dejando un gran legado en los cien años del Viejo León en el país.

UN SUEÑO AMERICANO
Las huellas de un hombre luchador las tiene marcadas en su cuerpo. Su piel muestra que ha sido un tipo que no se ha esforzado: “Me retiré del fútbol en 1980, luego trabajé en la Alcaldía Municipal de Tegucigalpa hasta 1991'.

'Tuve problemas allí y fue cuando me decidí a venirme a Estados Unidos, que primero pensé en hacerlo solo por tres meses en Nueva York, pero con tan buena fortuna que encontré un ambiente muy lindo donde me abrieron los brazos para que me quedara y ya llevo 21 años aquí”, dice un poco sonriente.

“Desde que llegué aquí casi heredé el trabajo de mi hermano, de ser pintor de una compañía de velos de novia, de velos de casamientos, me enseñó a trabajarlos y me quedé en esa empresa trabajando por 18 años”, cuenta el ex jugador del Olimpia.

A pesar de ser un hombre de 69 años, su amor por el fútbol se mantiene vivo, todavía juega partidos amistosos y cuenta que muchos lo admiran.

“Con la edad que tengo mucha gente se queda asombrada cuando me mira jugando y dice que cómo es que corro tanto, es mi pasatiempo y una forma de desestresarme. No pierdo el ritmo físico, lastimosamente hace poco casi me lastimo un pie en un partido”, dice “Shula” desde su casa en Nueva York.

LA VIDA EN ESTADOS UNIDOS
Desde que llegó a EUA, la vida de “Shula” ha sido trabajar: “Salía para mis labores 15 minutos antes de las 8:00 am, llegaba a las 8.30 am, entraba a las 9:00 am y pasaba todo el día pintando, o a veces me mandaban a otro departamento hasta las 4.30 pm que era el horario de salida”, esta rutina la hizo 18 años seguido.

Y sigue narrando: “El salario en sí no era muy bueno, pero para el modo de vida era un salario bueno a 11 dólares la hora. Trabajaba con un producto parecido al tíner y pintura parecida a la que le aplican a los carros”.

Una de las cosas que lamenta Gómez, es que siempre ha vivido solo en Estados Unidos, pues su familia está dividida. Su mujer nunca quiso irse.

“Casi siempre viajo en diciembre a mi país, me voy un mes y medio para ver a mi esposa que no le gusta subirse a los aviones, también tengo mi hija menor allá”, relata el “Viejo Shula”.

Desde marzo de 2012, Rigoberto fue jubilado de la empresa para la cual laboraba porque esta se trasladó a Nueva Jersey y por la distancia del centro de Nueva York hasta esa localidad, decidió pedir su retiro.

En los últimos años, la vida de “Shula” le ha cambiado luego del fallecimiento de su madre, Juana Murillo, quien partió de muerte natural hace algunos meses cuando ella pasaba vacaciones en Honduras.

“Siempre estuve con mi madre, para mí ha sido un duro golpe y voy a ver cómo me recupero. Ahora el que tiene que buscar la rutina soy yo, no quiero pasar mucho tiempo en mi apartamento para no recordarme de ella”, recuerda Gómez con nostalgia.

Por eso está pensando seriamente en no pasar muchos años lejos de su familia. “Tal vez por los cuidados médicos voy a estar cinco meses en Honduras y cinco en Nueva York, así aprovecharé para pasar con mi familia allá”, cuenta sentado en su sillón.

“Les dije a mis amigos, si algún día muero en Estados Unidos, que me lleven enterito a Honduras, quiero que me entierren en mi país, no quiero quedarme aquí”.

ADEMÁS:

¿Cómo fue su inicio?
Llegué al fútbol profesional por esas casualidades. Comencé jugando en la escuela Álvaro Contreras, estuve en Motagua, Gimnástico, Federal y en 1966 llegué a las filas del Olimpia.

¿Quién lo fichó?
En 1966 se da el cambio que un directivo del Federal me dijo que fuera a platicar con don Rubén Callejas Valentine (directivo de Olimpia) y así me fichó el equipo Merengue.

¿Por qué su hijo juega para Guatemala?
Él tuvo sus razones para decidirse jugar por Guatemala, lo estuvieron engañando mucho que lo iban a llamar a la Selección, nunca le dieron chance”.

MÁS...

SU FAMILIA: Mi esposa vive en Honduras, no le gusta subirse a los aviones y por eso no se viene a vivir conmigo a Estados Unidos.

HONDURAS: Un maravilloso país.

OLIMPIA: Jugué durante 18 años.

EL FÚTBOL: Me trae bonitos recuerdos.
EUA: Es un país que si te propones sales adelante. Yo llegué en 1991 y durante 18 años seguidos estuve trabajando.

¿Qué le dejó el fútbol?
Muchos amigos. Esto es lo bonito de esta profesión porque conoces muchas personas y con el paso del tiempo te recuerdan siempre.

¿Siempre quiso jugar en Olimpia?
Primero fui a probarme al Motagua, pero nunca me dieron oportunidad. Luego me fui al Federal en intermedia y después llegué a Olimpia.

EL PERFIL DE RIGOBERTO GÓMEZ

Nació en: Talanga, Francisco Morazán

Fecha de nacimiento: 16 de diciembre de 1944.

Edad: 69 años.

Debut en el fútbol: 1966.

Retiro: 15 de mayo de 1980 en un juego entre Olimpia y la Selección Nacional.

Equipos en Honduras: Olimpia.

Logros: Campeón con los merengues en 1966-1967, 1969, 1971 y el torneo 1977.

Trabajos en EUA: Vive en Estados Unidos desde hace 18 años. Llegó en 1991 y trabajó en pintura de velo de novia.
Está jubilado: Desde marzo de 2012 ha sido jubilado. Actualmente tiene un salario mensual de 1,300 dólares.

HUELLA EN EL FÚTBOL:
Uno de los recuerdos más sobresalientes de Rigoberto “Shula” Gómez fue cuando anotó aquel doblete de Honduras en Costa Rica en el famoso 3-3 el 10 de diciembre de 1972. El otro tanto lo hizo Jorge Urquía.