La vida de Guillermo “Pando” Ramírez dio un giro cuando la FIFA lo suspendió de por vida tras considerar que estuvo involucrado en el amaño de partidos con la selección de Guatemala.
El volante chapín estuvo en Trujillo y La Ceiba donde participó en encuentros benéficos y compartió con muchos amigos que le dejó su estadía en los clubes hondureños Marathón y Motagua.
Uno de los máximos exponentes que tuvo el fútbol chapín cuenta a DIEZ sobre lo que ha sido su vida después de ser suspendido de las canchas.
“Tengo una escuelita de fútbol en Guatemala, en Malacatán”, nos dice. Ramírez no esconde su aprecio por un país como Honduras, que le abrió las puertas.
“Me siento como un hondureño más. Me invitaron a venir para estos encuentros benéficos de Wilson y Figueroa, no lo pensé dos veces”.
El chapín fue condenado a una suspensión de por vida, de no jugar en ninguna Federación asociada a la FIFA después de considerar que participó en el arreglo de los encuentros de Guatemala contra Sudáfrica, Venezuela y Costa Rica.
“En la Federación de Guatemala lo que hicieron fue una marrullería y me terminaron dejando fuera, perjudicándome a mí, a otros jugadores y al pueblo guatemalteco por la equivocación de ellos. No agradecieron todo lo que les di a nivel de país, pero así es la vida y esto continúa, hay que seguir adelante y estoy bastante contento con lo que estoy haciendo”, señaló.
'SOY INOCENTE'
Para el “Pando” su vida en el fútbol ya está acabada porque no puede trabajar con ningún club federado.
“Claro que soy inocente. A mí me acusan nada más unos compañeros que jamás jugaron y que nunca hicieron nada por el país, pero bueno, a mí me chequearon todo, mis cuentas, mis contratos y lo que yo compré, cómo lo hice y no hallaron nada”, dijo.
Ramírez continuó relatando que “me quitaron la sanción y luego se mezcló la política, entonces se volvió a complicar la cosa. Tengo el papeleo donde se me había levantado la suspensión por falta de pruebas, pero Dios sabe por qué pasan las cosas y Dios es quien guía mi camino, yo estoy tranquilo”.
“Yo me siento bien con la gente hondureña y muy contento compartir con el cariño de esta gente catracha, la verdad que si me tocara escoger habría jugado con la Selección de Honduras y no con ese país que me terminó haciendo daño”, sentenció.
El “Pando” es nativo de Puerto Barrios, una provincia guatemalteca que es fronteriza con territorio catracho y agregó que “era fácil jugar, Honduras solo me queda a unos pasos, el destino es así y esto ya pasó”, finalizó.
SUS FRASES
'Tengo muchos recuerdos en Honduras, en el tiempo que estuve, los campeonatos que gané, estoy muy agradecido con ellos”.
'Miro muy bien el futuro de Honduras. Tiene jugadores muy buenos. Yo cuando veo los partidos apoyo a la Selección y quiero verlos en el Mundial nuevamente”.
