David Faitelson decidió salir de ESPN luego de 16 años. El polémico periodista comenzará una nueva aventura en Televisa en las próximas semanas y asegura que la relación con José Ramón Fernández está casi rota.
‘Joserra’ fue el encargado de formarlo en el periodismo deportivo en México y juntos debatían en programas como ‘Cronómetro’ y ‘Fútbol Picante’. Pero todo tiene un final.
Faitelson insiste en que no se marcha de ESPN por dinero y que lo hace por salir de su zona de confort. Afirma que su amistad con Fernández cambió desde que colaboró con ‘Tercer Grado’ de Televisa.
“José Ramón es todo un maestro y padre para mí, la reacción ha sido la esperada... él sabe donde voy. La relación se ha puesto muy delicada desde que ESPN aceptó la petición de Televisa de prestarme, porque nunca me pagó nada Televisa, me prestaban para el programa Tercer Grado”, arranca diciendo David en diálogo con W Radio.
“A partir de ahí José Ramón cambió. Suceden dos cosas: él sentía que lo estaba traicionado por irme a Televisa o porque él quería estar ahí. Como toda la gente que salimos en medios hay un espacio para el ego y protagonismo, algunos lo tienen en mayor medida y otros lo controlan... pero todos conocemos el ego de José Ramón”, añade.
“Yo le agradezco todo lo que haya hecho por mí, por formarme como periodista. Él me enseñó todo lo que sé de televisión y de periodismo, me fue llevando. Yo siempre le fui un hombre leal hasta el final, si él siente que lo estoy traicionado, pues ya es problema de él”, sostuvo.
Faitelson recuerda que su colega André Marín (Fox Sports) le recomendaba apartarse de Fernández y que realizara su propio camino.
“Yo tengo una filosofía: no te quedes en una zona de confort. Yo estaba tranquilo en ESPN, no es un tema de dinero, es una oportunidad para hacer algo diferente en esta época de mi carrera. André Marín me decía: corta el cordón umbilical con José Ramón. Y yo le decía: ¿para qué, si estoy bien?”, cuenta el analista de 55 años.
OBSESIONADO POR EL TRABAJO Y LOS INFLUENCERS
En uno de los momentos de la entrevista, David acepta que es un “obsesionado por el trabajo” y que por eso algunas veces pagaba de su bolsillo para hacer un viaje y dar cobertura, lo que provocaba que se endeudara con los bancos y la renta de su casa hasta que conoció a su esposa, quien se encargó de “ordenarme la vida”.
Faitelson también tocó el tema que ahora los ‘influencers’ tienen más oportunidades que un profesional. “Hay chicos jóvenes con otras ideas, formas de comunicar, hoy tenemos las redes sociales que son inagotables. El otro día me invitaron aun canal que solamente tenía jóvenes que eran influencers, con más de seis millones de seguidores en sus redes. Son los nuevos tiempos, es el nuevo camino...”.