Estamos hablando de Luka Modric, titular indiscutible en el cuadro blanco desde su llegada al cuadro blanco en 2012 a petición del prestigioso entrenador José Mourinho, quien vio en él lo que el mundo no pudo.
“Insistí tanto en traer a Modric al Real Madrid porque tenía todo lo que necesitábamos en el equipo: técnica, visión y lectura del juego, calidad a la hora de tomar decisiones, velocidad de pensamiento, pasaba en largo, en corto, marcaba desde fuera del área, sabía presionar, era inteligente para posicionarse y era intenso. Necesitábamos todo eso en el Real Madrid', declaró Mou a Sportske Novosti en un reportaje especial al jugador croata.
El mediocampista de 35 años se adaptó de gran manera a aquel club blanco de Mourinho que llegó hacia las semifinales de Champions League y la final de Copa del Rey, disputando 53 partidos en apenas su primera campaña donde prácticamente lo jugó todo.
Modric conquistó la Champions con el Real Madrid y lideró a la selección de Croacia en una heroica participación en el Mundial de Rusia 2018 donde alcanzaron la final, bastándole para consagrarse como el Balón de Oro ese año y romper con la hegemonía impuesta por Lionel Messi junto a Cristiano Ronaldo en tales entregas.
'Cuando alguien puede hacer historia con sus obras se convierte en inmortal. Luka Modric consiguió ser nombrado como el Balón de Oro, así que, por favor, no lo comparemos con nadie', cerró Mourinho.