La fiscalía presentó este viernes una denuncia por “corrupción entre particulares” contra el FC Barcelona y varios de sus exdirigentes en el marco de la investigación por unos supuestos pagos del club a una empresa de un exárbitro.
La querella presentada en un juzgado apunta al exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA), José María Enríquez Negreira, así como a los antiguos presidentes del Barça, Sandro Rosell y Josep María Bartomeu, informó la fiscalía provincial de la Ciudad Condal.
El Ministerio Público imputa a los denunciados un delito de “corrupción entre particulares en el ámbito deportivo”, así como un delito de “administración desleal” a los exdirectivos del Barcelona, a los que también achaca, junto a Negreira, otro de “falsedad en documento mercantil”.
La denuncia se ha presentado tras la investigación llevada a cabo por la fiscalía desde hace cerca de un año sobre unas irregularidades tributarias de la empresa de Negreira por unos supuestos pagos del club catalán.
El documento señala que Enríquez Negreira, que fue vicepresidente del CTA entre 1994 y 2018, recibió más de 7,3 millones de euros entre 2001 y 2018, por un supuesto asesoramiento verbal sobre cuestiones arbitrales.
El Barça cesó en sus pagos en 2018 cuando se remodeló el CTA con la llegada de Luis Rubiales a la presidencia de la Federación Española (RFEF) y Enríquez Negreira salió del organismo arbitral.
El entonces presidente azulgrana, Josep María Bartomeu, afirmó a los periodistas que sacaron el caso a la luz que el club decidió prescindir de sus servicios para recortar gastos.
“El Barça alcanzó y mantuvo un acuerdo verbal estrictamente confidencial con el denunciado Enríquez Negreira, a fin de que, en su calidad de Vicepresidente del CTA y a cambio de dinero, realizase actuaciones tendentes a favorecer al Barcelona en la toma de decisiones de los árbitros en los partidos que disputase el club, y así en los resultados de las competiciones”, señala el escrito de la Fiscalía que denuncia que el Barcelona pagó a Negreira.
Por su parte, el presidente actual, Joan Laporta, dijo esta semana que “quede claro que el Barça nunca ha comprado árbitros ni ha tenido la intención de comprar árbitros. Rotundamente nunca”.
El máximo dirigente azulgrana avisó que muy pronto llevarán a cabo una rueda de prensa para hablar específicamente sobre este escándalo que deja muy dañada la imagen del equipo.