El arranque del año trajo más problemas que el fin del 2016, y todo se agravó cuando varios clubes no comenzaron sus respectivas pretemporadas debido a las deudas que tienen con sus jugadores. 'Vos no podés plantear que ningún equipo entrene porque hay algunos que tienen una realidad distinta. Muchos de los casos se solucionaron parcialmente pero las deudas siguen existiendo', sostuvo.
También se refirió a lo que le deben los clubes con la AFA: 'Los números son importantes y el volumen de deuda es grande. El 80 por ciento de los deudores pertenece a la Primera División. El presupuesto medio de un equipo de Primera ronda los 5 millones de pesos. Es una gran contradicción que haya clubes que no llegaron a pagar los salarios de los jugadores y llevaron refuerzos a sus pretemporadas. Esta difícil situación económica abarca al 90 por ciento de los clubes'.
Así las cosas, en este momento es imposible que se inicie el torneo. La AFA está intervenida por una comisión que está intentando normalizar todo, pero está resultando imposible. Los equipos de las divisiones menores no quieren ceder ante la creación de una Súper Liga, tal como quieren River y Boca.
Por otro lado, están presionando para que se lleve a cabo las elecciones y así poder llegar al poder y cambiar todo el fútbol. La lucha de poderes entre la primera y la segunda división se ha incrementado en los últimos meses. Agregando a la crisis también el gobierno de Mauricio Macri, quien ya no seguirá dando dinero al fútbol por medio del programa 'Fútbol para todos'.
La liga argentina para por una de sus peores crisis, y por ahora no hay solución.