La prestigiosa revista señaló las dudas sobre la honradez de la FIFA que se decantó el 2 de diciembre de 2010 por Catar, cuya candidatura estaba apoyada por un presupuesto récord de 33,75 millones de euros.
France Football también habló de 'una reunión secreta' en el Palacio del Elíseo el 23 de noviembre de 2010. Entre los participantes: el entonces presidente de Francia Nicolas Sarkozy, el príncipe de Catar, Tamim bin Hamad al Thani, y el presidente de la UEFA, Michel Platini. Su supuesto objetivo: asegurar que Platini votaría por el emirato. Una 'sarta de mentiras' según el exfutbolista francés.
Su veredicto: en la atribución de los Mundiales de 2022 a Catar y de 2018 a Rusia no hubo corrupción, pese a ciertas irregularidades pequeñas y no hay motivo para reabrir el proceso de atribución.
CALENDARIO, UNA CUESTIÓN CALIENTE:
Desde el principio, la programación del torneo en pleno verano boreal fue polémica. En esa época del año, las temperaturas en Catar pueden superar los 50º C, lo que imposibilitaría jugar al fútbol.
La tendencia general apunta a que el Mundial-2022 se dispute en el invierno septentrional, pese a que ello supondría problemas de calendario para los campeonatos nacionales.
Platini apostó por esta solución desde el principio, mientras que Joseph Blatter, presidente de la FIFA, ha mostrado, recientemente, su apoyo a esta postura.
Para ello hay dos opciones: enero-febrero y noviembre-diciembre de 2022, en lugar de junio-julio. A título personal, Blatter afirmó que él prefería noviembre-diciembre.
¿'ESCLAVITUD' EN LAS OBRAS?
En septiembre de 2013, The Guardian, el respetado diario británico, publicó un reportaje sobre las obras en Catar y habló de 'explotación' y de un abuso 'que parece esclavitud moderna'.
Según la cifras del periódico, entre junio y el inicio de agosto de 2013, 44 obreros nepaleses habrían muerto en la construcción en el emirato. A ese ritmo, al menos 4.000 trabajadores podría perder la vida en Catar antes del inicio del Mundial-2022, según denunció la Confederación Internacional de Sindicatos (ITUC).
La FIFA expresó rápidamente su 'preocupación', aunque las obras en las que se produjeron los decesos no estaban directamente relacionadas con el Mundial-2022 y la construcción de los estadios. Catar se enfadó.
'No hay esclavitud ni trabajo forzoso en Catar', declaró Ali Al Marri, presidente del Comité Nacional de Derechos Humanos, para quien 'las acusaciones del The Guardian son falsas y las cifras exageradas'.