Basta mirar las fotos de los entrenamientos para notar una diferencia, Márquez entrena con una camiseta diferente a la de sus compañeros, sin ningún patrocinio.
La razón es simple, debido a estar con una investigación de parte de la justicia mexicana y estadounidense, debido presuntos vínculos con el narcotráfico, el veterano fue 'boicoteado' por los patrocinadores de la selección, que pidieron a la Federación que sus marcas no sean asociadas al jugador.
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La situación es de tal forma peculiar, que Márquez tiene que beber agua diferente de los demás colegas, ya que el patrocinador de la selección en este particular tampoco quiere su nombre asociado al jugador del Atlas.
Por otro lado, el defensa tampoco puede dar ninguna entrevista con los 'banners' oficiales del Mundial 2018 como telón de fondo.