El vicepresidente de la FIFA, el príncipe jordano Ali bin Al Hussein, aboga por que el Mundial de fútbol de Qatar en 2022 se celebre durante el invierno europeo, para evitar las temperaturas extremas de junio, julio y agosto en el emirato.
En una entrevista que publica hoy el diario alemán 'Tagesspiegel', el vicepresidente de la FIFA indicó que el cambio de fechas es preferible, aunque es competencia exclusiva de Catar y puede obligar a países como España y Reino Unido a modificar su calendarios habituales.
'Creo que es mejor jugar en invierno. Pero eso lo debe decidir en todo caso el anfitrión', afirmó Al Hussein, tras analizar el clima del emirato.
A su juicio, el traslado al invierno septentrional de la competición futbolística no supondría un gran inconveniente en las principales ligas europeas, ya que 'en Europa hay una pausa invernal'.
Efectivamente, la celebración entre diciembre y enero del Mundial de 2022 apenas afectaría al desarrollo de competiciones nacionales como la Bundesliga alemana, que tradicionalmente para durante cinco semanas en invierno, ya que un mundial dura en torno a cuatro semanas.
No obstante, forzaría a otras competiciones a introducir cambios en sus calendarios como en la Premiere inglesa, que prácticamente no para, o en La liga española, que tan sólo descansa durante dos semanas en invierno.
Desde su anuncio oficial, la celebración del Mundial de 2022 en Qatar ha creado una intensa polémica, debido a la escasa tradición futbolística del emirato, sus necesidades de infraestructuras y su clima, poco compatible con la práctica deportiva.
Las temperaturas en Doha, la capital catarí, en enero oscilan normalmente entre los 12 y los 21 grados centígrados, pero en julio y agosto llegan a elevarse hasta los 41 grados de media, con máximas registradas de 59 grados.