2014-06-09
La selección holandesa se divirtió este lunes realizando un
entretenido entrenamiento de playa ante la presencia de una decena de aficionados.
Los trabajos fueron suaves y lo hicieron con la intención de soltar las cargas de trabajo acumuladas en los últimos días.
A la plantilla se le vio muy alegre y accesible con el público que los estuvo asediando en la localidad de Gávea, Río de Janeiro.
Este ambiente para nada se vivió durante la mañana donde hubo fuertes discusiones entre Arjen Robben y Bruno Martins luego de una fuerte entrada del segundo que pudo causar una lesión seria.
Al final también la delegación europea tuvo el permiso para visitar el Cristo Redentor que está en la zona más alta de Río de Janeiro.