Franklin Castellanos a sus 24 años está luchando contra todo en Estados Unidos con tal de convertirse en un futbolista profesional, pues aunque haya jugado un encuentro de lujo, aún no pertenece al primer plantel y tampoco tiene solucionado su estatus migratorio en aquel país.
El jovencito de 1.67 de estatura se fue de Honduras hace 17 años de forma ilegal, tenía siete años cuando su padre, del mismo nombre, lo mandó a traer buscando un mejor futuro, que por fortuna lo encontró.
Frank nació en 1990 en la colonia El Higo de Siguatepeque, aquí creció hasta los 5 años con su abuela y su madre Dilcia Rivera.
GRADUADO EN ADMINISTRACIÓN DE EMPRESAS
Castellanos no solamente es futbolista, también es un profesional, se graduó como administrador de empesas en Iona College, una universidad católica privada en la localidad de New Rochelle en Nueva York.
Además de futbolista, también trabaja en una clínica como recepcionista o asistente de pacientes a quienes le programa su cita con los médicos, esto lo hace medio tiempo debido a que también entrena.
Su padre nos relata parte de la historia de su hijo que espera que ese gol a los 'blues' pueda darle un giro de 180 grados a su carrera.
'Siempre he sido entrenador de fútbol y lo preparé por mucho tiempo hasta que llegó a la secundaria y ahí ya tuvo otros técnicos, fue creciendo como jugador y como persona', cuenta a DIEZ su padre que tiene 20 años viviendo en Nueva Jersey.
Recuerda que 'vino con una pelota en sus brazos, es un niño aplicado, humilde y con sueños de ser futbolista. Ha sido trabajador, buen estudiante, hijo y como padre tengo que resaltarlo, me siento orgulloso de él', elogia.
DESDE HACE TRES AÑOS CON LOS RED BULLS
Su carrera en el fútbol la hizo en el colegio y la universidad, pero desde hace tres años forma parte del New York Red Bulls USL Pro team que son las reservas que participan en la USL, una liga donde participan el 90% de estudiantes universitarios.
'Aquí jugaban contra equipos de la conferencia, pero ahí no tenía contrato porque todavía están en preparación, hasta este año que firmó contrato con los Red Bulls de la USL', afirma.
SU ESTATUS LEGAL, EL MAYOR PROBLEMA
Para jugar en la MLS con el Red Bulls, Castellanos tiene una dificultad muy grande y es la de su estatus legal, pues al entrar de forma ilegal a Estados Unidos solo logró conseguir un permiso como estudiante.
Actualmente tramita la Green Card que es la residencia permanente en Estados Unidos por lo que solo podría optar a jugar como extranjero hasta que su situación migratoria esté clara.
'El equipo únicamente ficha como extranjeros a grandes estrellas, no sé si van a querer hacer lo mismo conmigo, espero poder cumplir mi sueño de jugar en la MLS', afirma el joven Castellanos.
Su padre que espera que después de lo del miércoles: 'Debe existir la posibilidad de que pase al club de primera, sino sería una injustia, pero estoy hablando como padre, es mi deseo, pero le cambió la cara al club', dice.
Y relata: 'Cuando él entró tuvo una oportunidad de gol, después tuvo otro pase y luego una habilitación y a los diez minutos que ingresó ya estaban ganando 2-1'.
RECHAZO EN PARRILLAS ONE
El mayor golpe en este 2015 para Franklin Castellanos fue cuando vino a Honduras en enero a realizar una prueba con el Parrillas One, pero se fue decepcionado porque no le hicieron caso.
'Me vine decepcionado, nadie me dijo, ni los directivos ni técnicos, para ellos era solamente un extraño que entrenaba, con los compañeros me llevaba muy bien', dice el futbolista.
Mientras su padre le advirtió que no quería que viniera: 'No me gustaba el equipo, estuve en los entrenamientos y lamentablemente tengo que decirlo, amo mi país, pero no era un club profesional por las condiciones de practicar, eran lamentables', revela su padre.
De momento a Franklin Castellanos le toca seguir luchado en el equipo de reservas a la espera que el club se interese en ficharlo como extranjero y cumplir su deseo que es jugar en la MLS.