“Lamentamos todo porque la integridad física de las personas está por encima de un partido de fútbol. Estoy un poco conmocionado por lo vivido dentro del bus con todos los jugadores y la delegación que íbamos al estadio, es un tema de seguridad que debe de solventarse”, inició contando Diego.
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El argentino narra con detalles lo que pasó: “Nos tomó de sorpresa el ataque porque otras veces hemos hecho esta misma ruta y no hemos sufrido esas agresiones. Otras veces nos íbamos en un autobús más chiquito y me imagino que si esta vez nos vamos en ese, nos dan vuelta, pero si sufrimos agresiones graves todo el plantel”.
Momentos cuando se atienden a los desmayados en la pista del estadio Nacional.
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¿De quién es la culpa del ataque? Diego lo responde: “Hay rutas alternas, pero la Policía nos llevó por esa calle y a los uniformados también los agredieron; ellos tuvieron pánico y se fueron adelante nuestro. Que nos hayan agredido de esa manera yendo del hotel al estadio es la primera vez que nos pasa”, comentó la Barbie.
Los jugadores de Motagua, Jonathan Rougier, Emilio Izaguirre y Roberto Moreira los heridos.
El entrenador explica por qué pasan estas cosas. “Son tres jugadores que le entraron vidrios en la boca, en todo el cuerpo; a Emilio Izaguirre le dieron en el ojo y más el momento; lamentamos lo que pasó, esto es un tema de seguridad. Nosotros hemos hablado con los dirigentes que en las afueras del estadio siempre han poca seguridad y hay que mejorar”, reconoció.