Harold Fonseca, portero de Olancho FC, no ocultó su decepción por el empate sin goles en casa ante Motagua en la quinta jornada del Apertura 2024 de la Liga Nacional de Honduras.
Fonseca expresó que el equipo se fue con un sabor amargo, ya que en su terreno esperaban sumar de a tres puntos. A pesar de la frustración por no lograr la victoria, destacó la solidez defensiva del equipo, subrayando que mantener la portería en cero es un aspecto positivo que les genera confianza para los próximos compromisos.
Harold también reflexionó sobre el desempeño ofensivo del equipo, admitiendo que durante la primera mitad fueron demasiado cautelosos, lo que les costó en términos de generación de oportunidades de gol. A pesar de los ajustes tácticos realizados en la segunda parte, el arquero reconoció que la falta de contundencia en el ataque es un tema que preocupa, ya que en cinco jornadas apenas han logrado anotar tres goles. Sin embargo, confía en que con autocrítica y trabajo, el equipo podrá mejorar en este aspecto.
En relación a su posible convocatoria a la selección hondureña para los próximos partidos de la Liga de Naciones, Fonseca reiteró su disposición para representar al país, dejando claro que nunca ha cerrado las puertas a la selección.
El portero mencionó que, si el técnico Reinaldo Rueda decide contar con sus servicios, estará listo para dar lo mejor de sí. Además, evitó entrar en polémicas sobre declaraciones anteriores, prefiriendo enfocarse en su rendimiento con Olancho FC y seguir trabajando para mejorar.
¿Otro empate en la quinta jornada, qué calificación le das?
Nos vamos con un sabor amargo, porque en casa tenemos que ganar. Obviamente, no pudimos sumar de a 3 y nos vamos cabizbajos, porque uno siempre se prepara durante la semana para sumar de 3, y más en casa con nuestra gente. Lastimosamente, no fue así. Estábamos conscientes del rival que teníamos enfrente; al final no se ganó, pero nosotros en la parte defensiva mantuvimos el cero en la portería, y eso nos llena de confianza.
¿No sientes que respetaron de más a Motagua, estando en casa, con su gente?
Respetar, a todos los equipos los hemos respetado. Creo que fuimos un poco más cautelosos en la primera parte, donde nos faltó ese empuje en la parte ofensiva. Creo que lo hablamos en el entretiempo, que teníamos que adelantar más las líneas y atacar más. En la segunda parte fue diferente, cuando el profe hizo sus cambios tácticos, pero no ajustó. En la parte ofensiva estamos alarmados, porque tenemos cinco juegos y solo hemos metido tres goles, y han sido en el mismo partido.
Tampoco es decir que estamos mal, pero creo que tenemos que ser muy autocríticos y saber que el fútbol es de goles. El siguiente fin de semana jugamos en casa y esperamos darle esa alegría primero a nosotros y también a la afición.
Se vienen dos partidos de Liga de Naciones. Recientemente, el profe Rueda decía que no sabía si te iba a convocar. ¿Le abriste las puertas nuevamente a la selección?
Yo nunca las he cerrado, soy un hondureño más y siempre que el profe quiera contar con mis servicios, bienvenido sea. Yo siempre voy a apoyar a la selección, para mí es un tema de directiva y al final lo que me toca es seguir trabajando.
¿Crees que necesitamos a Yustin Arboleda por esa falta de gol en la selección?
Es igual como fue el tema de Jony (Rougier), ya son hondureños más y esas decisiones pasan por directivos y el cuerpo técnico. Conozco a Yustin y para mí es un gran jugador, persona y amigo. Si lo toman en cuenta, bienvenido sea.
¿No tenemos un delantero con esas características para la ‘H’?
Delanteros hay, pero no soy técnico, y él es quien toma las decisiones. Él sabrá si lo ocupa o no. Si lo llama, bienvenido sea. Por mi parte, yo hago mi trabajo y respondo en el campo. No es prepotencia, sino con un grado de humildad, de que yo hablo en las canchas y creo que mis números están ahí. Siento que he venido muy bien, estamos nuevamente peleando por mantener la portería en cero y ser los menos goleados en lo que va del torneo con Real España. Estamos tranquilos, trabajando y conscientes de que hay mucho que mejorar. En cuanto a la selección, yo nunca he cerrado las puertas. Si el profe me llama, bienvenido sea.
¿Estás golpeado por lo que pasó o eso ya es página aparte?
Yo no quiero hablar del pasado. Obviamente uno es futbolista, uno tiene sentimientos y a veces necesita analizar muchas cosas, ser autocrítico, y yo estoy tranquilo. Estoy enfocado en el equipo, en hacer las cosas bien, y si el profe Rueda cuenta con mis servicios, estoy a la disposición. Siempre digo que tengo la espinita de defender ese marco, que es un sueño y orgullo. Si se da, bienvenido sea; si no, pues seguiré trabajando.
Con los números que usted menciona, no ha sido considerado para los microciclos. ¿Qué opinión tiene sobre que Rueda hace unas semanas dijo “Vamos a ver si invitamos a Harold”?
No quiero armar polémica, él tendrá sus argumentos y yo los míos. La verdad, no tengo inconvenientes con nadie, ni con él, ni con directivos, ni con nadie. A uno del cuerpo técnico de él le aclaré que yo nunca hablé de lo que salió en la prensa. Fueron calenturas del momento que quizás él pasó y lo dijo, pero yo tampoco voy a señalarlo a él. Si me toma en cuenta, bienvenido sea, y si no, a seguir trabajando.
¿Te hace ilusión ser parte de este proceso y por qué no, en el Mundial 2026, si Honduras clasifica?
En todos los procesos en los que he estado, es una ilusión, un orgullo estar en la selección. A mí no me gusta ser un conformista, un jugador más. Si voy a la selección es porque quiero competir, sudar la camiseta, y mi sueño es representar a la selección. Como siempre he hecho, cerrar la boca y trabajar. En ciertos momentos uno analiza muchas cosas, uno es autocrítico, y mi punto de vista me lo reservo yo.
Al final, en ningún momento doy una declaración fuera de lugar. Cuando llegué a San Pedro Sula, dije que el ciclo de la selección estaba cerrado en ese momento porque estaba enfocado en mi equipo, pero luego tergiversaron mis palabras y dijeron cosas que no eran. Siempre digo que en la selección están los mejores y siempre desearé lo mejor porque es mi patria, mi país. Será un sueño y una ilusión representar a Honduras en un mundial.