Hernán Tota Medina, entrenador del Motagua, no la pasó nada bien en los últimos minutos del juego de la final de ida ante Olimpia en el Estadio Carlos Miranda de Comayagua.
Tras ingresar al campo con una bronca monumental contra Armando Castro, el réferi no dudó en echarlo del terreno de las acciones en el minuto 82 del juego.
El argentino le fue a reclamar al central del partido, que tampoco perdonó a Hugo Caballero, entrenador de porteros del azul profundo.
Minutos después de la expulsión, Hernán Medina tuvo que dar directrices desde la gradería de populares para no perderse ni un momento del juego.
Sobre el final del partido el juez central señaló penal en favor del Olimpia luego de una barrida de Denil Maldonado en el que derribó a Michaell Chirinos, atacante merengue.
CRUCE DE PALABRAS
Ante ello, los insultos a la Tota no se hicieron esperar, incluso, tuvo un cruce de palabras con un hincha motagüense que estaba cerca de él en el alambrado.
Medina se defendió respondiéndole al fanático: “Yo también estoy con familia, yo estoy aquí trabajando para que las cosas salgan bien”.
Afortunadamente todo quedó en palabras y no pasó a más en la complicada noche que vivió el director técnico del Motagua.