Liga Nacional

Walter Martínez: 'Cuando mataron a mi papá, me tocó meterlo al ataúd'

Walter Martínez, figura del Marathón, relata el duro momento de la muerte de su padre. El “Colocho” también repasó varias etapas de su carrera como futbolista

2017-04-18

El “Colocho” Walter Martínez vive un gran momento futbolístico con el Marathón. El cipote ha pasado duras etapas en su vida, la más reciente fue el asesinato de su padre en San Pedro Sula, pero que según él mismo dice, en lugar de hundirlo, le ha dado mucha fortaleza para seguir adelante. Es un cipote muy humilde y con ganas de seguir creciendo.

Walter, un poco complicada tu vida deportiva, casi te quedás en nada, casi desapareces del fútbol.
Sí, casi desaparezco y más cuando fui a segunda división, pues ahí a uno nadie lo mira, es complicado, las canchas y todo eso, es difícil, pero gracias a Dios aquí estoy en Marathón.

¿Por qué crees que la segunda división de Honduras es bien complicada?
No pagan bien, la logística, me acuerdo que en el equipo en el que estábamos solo había como 8 balones al principio y solo con esos entrenábamos, viajábamos dos horas antes del partido, una locura.

¿Es frustrante para un futbolista como vos haber jugado en la segunda división de Honduras?
No, porque ahí aprendí bastante, porque ahí el fútbol es más fuerte. A pesar de las dificultades fue una bonita experiencia.

Leer: PRIMI HABLA DE SU FUTURO EN REAL ESPAÑA

¿Cómo caíste a Marathón?
Pues el “Bombero” Ramírez me dijo que iba a conseguirme una oportunidad en Marathón. Me decía: “vos no tenes que estar aquí en segunda”. Yo me reía, pero él me aseguró que hablaría con Rolin Peña. No le creía, me lo había tomado como juego hasta que un día me habló y me dijo que había conversado con Rolin y que querían que hiciera una prueba, pero le había dicho que no ocupaba prueba. Después fui cinco días a hacerla y al final la pasé y me quedé.

Antes estuviste con el Real España, pero allá no pudiste demostrar todo tu talento ¿Qué pasó?
Sí, eso mucha gente me lo pregunta, qué fue lo que pasó ahí. Todo los partidos los jugué con Necaxa y venía de hacer goles, pero el problema era por la venta del equipo, que íbamos a desaparecer.

¿Ajá y qué pasó después?
Llegué tarde a Real España, ya el profesor Chelato tenía el equipo y me dijo que iba a ser difícil, que yo no podía estar en cuenta porque ya tenía su grupo. Y así empecé ese torneo hasta que vino Nahún Espinoza y él fue el que me metió a jugar, dos partidos de la liguilla, creo que fue con Motagua.

¿Se ha acercado algún otro club? Ojo que en estos momentos podrías ser uno de los jugadores más apetecidos de la Liga Nacional...
No, todavía no he hablado con ningún otro equipo. Quedaré libre al final del campeonato y veremos qué sucede.

Foto: Diez

El jugador Walter Martínez es uno de los referentes del Marathón en el presente campeonato.

Normalmente en la vida hay que ser perseverante y siento que vos lo has sido para vivir este momento.
Sí, me ha costado mucho, he pasado por situaciones difíciles, pero aquí estoy, motivado para seguir haciendo bien las cosas.

¿Cómo qué situaciones difíciles? Normalmente en la vida pasan cosas que el ser humano no cuenta...
Pues pasé por eso, que estuve sin equipo. En ese tiempo quedé sin contrato, no sabía si ir a trabajar o seguir jugando porque yo me ponía a pensar que era mejor estar sufriendo en mi casa que en otro lado y entonces un día en la noche dije que no podía caerme, porque tanto que me costó jugar en primera, tantas cosas que por las que pasé y no me dejé vencer.

¿Pensaste retirarte del fútbol y apostarle a otra actividad para ganarte la vida?
Sí, claro, porque soy de una familia humilde que necesita de mi apoyo, mi mamá, mi esposa, mi niña, entonces yo necesitaba un ingreso como sea.

¿Qué pensabas hacer si hubieses dejado el fútbol en ese momento, cómo te ibas a ganar la vida?
Pues no sé, cualquier cosa iba a salir, pero sí, pensaba buscar trabajo para seguir ayudando a mi familia y a mi mamá.

Este momento futbolístico Walter, esta producción con Marathón, ¿cómo la has sabido llevar?
Aquí con mi familia, que siempre me ha a poyado, aunque he pasado momentos difíciles, pero creo que Dios a uno le da fuerzas a uno para seguir adelante.

¿Cómo qué momento difícil?
Pues, ahorita en noviembre mataron a mi papá. Pero eso más bien me ha motivado más a seguir trabajando.

¿Porqué mataron a tu papá?
No sé, eso mismo me pregunto yo, por qué lo habrán hecho, si él era una persona tranquila, yo no entendía, porque para imaginar los disparos que le hicieron. No sé porqué lo querían matar. Yo lo visitaba porque él ya se había divorciado con mi mamá, tengo un hermano que mi mamá ya lo tenía, pero mi papá lo crió. Siempre me llevaba bien con él. Recuerdo que todos los fines de semana que no había partidos yo me iba donde él, entonces eso se me ha hecho difícil ahorita, aunque gracias a Dios he sabido superar eso porque son cosas duras de la vida.

¿Había una gran conexión entre vos y tu padre, eran buenos amigos?
Sí, eso es lo que me afectó mucho. Cuando lo mataron, a mí, me tocó hacer todo. Tuve que ir a traerlo a la morgue, cosas por las que yo nunca creí que iba a pasar, me tocó meterlo al ataúd, que iba a saber yo de eso, ver a mi a papá así, entonces eso fue un momento muy duro y no me gusta mucho hablar de eso porque me reviento a llorar.

¿Te marcó la vida?
Sin duda, porque yo era todo con mi papá.

¿A dónde estabas cuando te llamaron para decirte que habían matado a tu padre?
Jugando. Estábamos disputando la liguilla contra Motagua. Íbamos para el campo cuando me llegaron a avisar de que mi papá estaba baleado, en su momento yo no creía, porque como te digo, él vivía en un lugar tranquilo y yo hasta me quedaba a donde él y le decía: “papá, ¿por qué no cerras las ventanas?”. Y él me decía: “No, aquí no roban”. Pero yo siempre le decía que había que cerrar todo y él me insistía que ahí no pasaba nada y ese día, que me dieron esa noticia, creí que era una broma.

¿Creíste que solamente era un simple balazo?
Sí, yo pensé que solo era un balazo o algo, pero no que eran varios los que tenía. Le dieron cinco disparos.

¿Tenía enemigos tu papá? ¿Te había comentado algo él?
No, nada de eso, yo casualmente tenía dos semanas de no ir a donde él, pero habíamos hablado un día antes y me dijo: “Aquí miré a tu compañero, tengo un compañero que vive por donde él, Perdomo y le dije que te diera jalón si no querías gastar gasolina. Yo le dije que no podía ir porque estaba jugando seguido y esa fue la última vez que hablé con él antes de que estuviese internado en el hospital, pero nunca se me pasó por la mente de preguntarle quién le hizo eso, porqué pasó. Mi papá llegó hablando y todo, luego falleció.

¿Entonces lo lograste ver con vida en el hospital?
Sí, él estaba vivo, la mujer de él lo iba a llevar a una clínica privada, pero cuando yo llegué ya lo tenían ingresado en el Catarino, entonces yo llegué y ya lo miré todo baleado y como le digo, yo quise hablar con él, pero solo le decía que se tranquilizara, porque él lo que quería era que lo operaran rápido, tenía una bala en el abdomen y me decía que le estaba doliendo. La doctora me dijo que lo llevara a hacerle esa cosa de los rayos-X, pues así fue, pero también eso fue difícil ya que él solo me apretaba la mano y me decía: “Hijo, dile al doctor que por favor me opere porque me duele”. Yo nunca pensé que iba a morir, porque lo miraba tan fuerte ese día en el hospital.

¿Pero tu papá murió en tus manos, estabas vos en ese momento?
No, lo ingresaron porque lo iban a operar en el hospital.

¿Vos estabas al lado de el en el hospital, nunca lo abandonaste?
No, toda la noche estuve preguntándole a la muchacha como había sido la operación y después volví, porque estaba desesperado, me quedé esperando en la sala donde los operan, pero yo me había ido a dar una vuelta porque no aguantaba la cabeza. En eso escuché a un señor que dijo: “pucha, salieron como cuatro muertos de ahí”. Sentí que me destrozó el corazón, porque me pregunté: “¿será que mi papá es uno de ellos?”. Pues al rato salió la doctora y me dijo que había salido bien de la operación, después yo me sentí tranquilo, me fui a bañar al apartamento, a las 3.00 de la tarde fui a traer a mis hermanos a la terminal de buses y me dicen que le ha pegado un paro, cuando voy me informan que de un solo le pegaron tres paros y de ahí ya no aguanto más.

¿Eso te ha fortalecido para agarrar las cosas con seriedad, responsabilidad y hacerlas bien?
Sí, porque yo creo que a mi papá no le gustaría verme todo caído, aunque hay momentos en los que recuerdo todo lo que pasé con él desde mi infancia, me llevaba a su trabajo porque era maestro de albañilería, solo teníamos una bicicleta y sabes lo que es andar en bici en Tegus. Subíamos toda la cuesta del estadio Nacional porque él trabajaba por Plantas Tropicales y de todo eso me recuerdo. Todo eso me ha ayudado para salir adelante y creo que si me pongo a pensar en decaer y todo eso creo que a mi papá no le hubiera gustado.

Foto: Diez

Walter Martínez junto a Limber Pérez con quien habló de su carrera deportiva. Foto Delmer Martínez.

¿El Primitivo te separó del Vida de la ceiba o cómo se dio tu salida?
Estuve un torneo y como ya no tenía contrato con Vida me dijo que ya no quería tener jugadores a préstamo y todo eso, y así fue como salí del club. él fue muy claro conmigo y realmente las cosas son mejor que se den de esa manera.

Ahora que se aproxima la Copa de Oro, ¿Sentís que se te pueda convocar a la Selección?
Uno trabaja siempre para estar en la Selección Nacional y ojalá Dios quiera que algún día me puedan hacer un llamado. Me gustaría que sucediera.

¿Se puede considerar a Marathón un equipo que luchará por el campeonato?
Sí, nosotros desde un principio esa ha sido la meta, pelear el primer lugar y ganar el campeonato.

¿Cuál ha sido la clave de Manolo hacia ustedes? Veo que keosseián es el “dios” que llega y las cosas cambian.
Bueno, sí, así dicen, será la personalidad del profesor. Aunque aquí hay un grupo que somos una familia, yo creo que ha sido nuestra base este torneo, que hemos estado juntos en todo momento.

Olimpia se ha caracterizado por siempre contratar a los mejores jugadores, vos estuviste en el equipo, ¿Qué pasó que no te contrataron?
Sí, mucha gente me pregunta lo mismo, que por qué no me quedé. Yo estaba parado y les pedí permiso para poder entrenar y nunca hablé con ellos ni nada, solo estuve como dos semanas, después me habló el profesor Mauro Reyes por el proyecto que tenía Independiente y me fui.

¿Cuáles son las metas de Walter para cerrar este momento futbolístico?
Pues primero quedar campeón con Marathón y seguir trabajando para obtener mi llamado a la Selección Nacional.

Hoy que tu contrato prácticamente se te vence, ¿No hay alguna posibilidad para salir al extranjero?
No, nada, uno a veces para eso trabaja, para estar en la Selección y poder a salir al extranjero, y espero que eso algún día se me pueda dar.

¿Vamos a seguir viendo a Walter Martínez desbordando por ese costado izquierdo y metiendo esos golazos que hacen celebrar a todo mundo?
Pues eso espero, seguir trabajando fuerte y que el profesor Manolo me siga tomando en cuenta. Estoy motivado y con ganas de aportarle cosas importantes al Marathón.