El jurado, formado por cinco miembros del Club, tres miembros del Colegio de Arquitectos de Catalunya (COAC) y un miembro del Ayuntamiento de Barcelona, tomó la decisión después de un proceso de revisión de las propuestas presentadas, a cargo de una comisión técnica, según los criterios establecidos en el pliego de bases y requerimientos del concurso.
El presupuesto para el nuevo estadio ronda los 400 millones de euros, el estadio remodelado albergará 105.000 aficionados, todos sentados y bajo cubierto (6.000 más de la capacidad del actual Camp Nou), y con una entrega del campo remodelado para febrero del 2021, siendo el mayo del año que viene el inicio de las obras.
La reunión en la que se ha tomado la decisión se ha celebrado esta tarde en la Sala de Prensa Ricard Maxenchs del Camp Nou.
La propuesta del equipo Nikken Sekkei + Pascual i Ausió Arquitectes destaca por ser abierta, elegante, serena, intemporal, mediterránia y democrática. Descompone y trata con ingenio la gran altura y amplitud fruto de la necesaria ampliación de la instalación.
También destaca por su relación con el entorno, dando profundidad, generando sombras y haciendo que los socios sean los protagonistas de la fachada y participen del espacio libre en todo momento.
La propuesta presenta una sutil y muy estudiada intervención en el entorno para facilitar la circulación y conseguir diversidad de usos urbanos en el Campus Barça, y garantiza una construcción clara y segura.
En definitiva, se trata de una solución única, como única es su génesis, reproduciendo la tan característica visión de la grada y marquesina de tribuna, de dentro a fuera, un silencioso y contundente homenaje al estadio de Francesc Mitjans de 1957.