Bayern Múnich venció este sábado al Tottenham (2-3) en Londres y se quedó con un título amistoso. El conjunto bávaro cumplió en su amistoso con goles de Upamecano, Gnabry y Muller mientras que los Spurs anotaron por medio de Kulusevski (doblete).
Pero lo más llamativo del encuentro fue que tras el pitazo final, se dio una insólita situación con Harry Kane, el delantero que aún no ha podido ganar un campeonato oficial.
Kane enfrentó por primera vez al Tottenham, el club que le dio todo, y fue un momento más que conmovedor. Tras ganar el partido, el Bayern tenía que levantar un trofeo, pero el jugador británico no quería saber nada.
Kane fue capitán del Bayern durante este duelo y le tocaba levantar el título, pero se negó. Se quitó el gafete y se lo dio a Kimmich para que lo alzara él o se lo diera a otro compañero.
El atacante entendió que levantar un título (por más amistoso que sea) frente al Tottenham era una falta de respeto y por eso no accedió.
En la celebración, Harry se ubicó a un costado y quien levantó el trofeo finalmente fue el arquero Manuel Neuer. Luego, se acercó a la tribuna donde estaban la afición de los Spurts y los saludó a la distancia.
Está claro que para Kane irse del Tottenham la temporada anterior fue una decisión difícil.