Es impresionante la gran cantidad de agua y hielo que han traído las empresas distribuidoras y se vende como pan caliente.
Los aficionados se las han ingeniado y hasta con cajas de cartón se protegen del inclemente solo que baña a San Pedro Sula y eso hace que el coloso arda por la alta temperatura.
'Esto está terrible, siento que me ando derritiendo... Está canija la temperatura', dice el fotógrafo mexicano Jorge Barrera del periódico ESTO quien suda como si estuviese metido en un baño sauna.
Los sombreros de charro pero al estilo catracho, han sido otra de las formas que busca la afición para taparse del sol.
Desde 100 lempiras en adelante se venden en las afueras del estadio y cientos de aficionados los han adquirido para protegerse.
'Yo me tuve que poner bloqueador porque sino me voy a poner roja... Pero no importa aquí lo que vale es que gane la Bicolor', dice Marlene quien vino desde La Entrada de Copán y se ubica en los tendidos populares que por ahora el sol cae directamente sin clemencia.