Liga Nacional
El Marathón-Real Sociedad comenzó con 45 minutos de retraso
Dos partidos de la fecha dos de la Liga Nacional han sufrido retrasos de hasta 45 minutos.
Dos partidos de la fecha dos de la Liga Nacional han sufrido retrasos de hasta 45 minutos.
2015-08-08
Este viernes en El Progreso el partido entre Honduras y Olimpia se retrasó porque los uniformes de ambos equipos eran muy parecidos. Increíblemente hoy nuevamente sucedió en el estadio Morazán entre Marathón y Real Sociedad.
En el Morazán , la polémica excedió los límites de la tolerancia, por más de 15 minutos los 22 jugadores se mantuvieron en la cancha, parados y extendiendo los calentamientos. Ninguno de los equipos quería ceder. Real Sociedad estaba totalmente de blanco y Marathón de camisa verde y calzoneta blanca.
El árbitro Oscar Gerson Almendárez lanzó una amenaza: esperaría 30 minutos y sin ninguno cedía el partido sería suspendido. Por cumplirse el plazo, los tocoeños corrieron rumbo al camerino a cambiarse la pantaloneta.
Al regreso de los aceiteros, la cosa se puso peor, nuevamente la negociación se trabó. Las calcetas de ambos equipos eran blancas. Esta vez había otra dificultad, Real Sociedad no tenía de otro color.
Y los verdolagas no querían ceder, 'estamos en nuestra casa', dijo el capitán Berríos, 'ustedes no quieren', jugar alcanzó a decir Horacio Londoño. Pero el entuerto se terminó. Real Sociedad se cambió las calcetas, los verdolagas se las prestaron.
Cosas de la liga, una situación simple provocó un retraso de 43 minutos. Falló la cuarteta arbitral en la revisión de indumentaria y luego la intransigencia de ambos clubes retrataron a la liga en una dimensión burocrática.
En el Morazán , la polémica excedió los límites de la tolerancia, por más de 15 minutos los 22 jugadores se mantuvieron en la cancha, parados y extendiendo los calentamientos. Ninguno de los equipos quería ceder. Real Sociedad estaba totalmente de blanco y Marathón de camisa verde y calzoneta blanca.
El árbitro Oscar Gerson Almendárez lanzó una amenaza: esperaría 30 minutos y sin ninguno cedía el partido sería suspendido. Por cumplirse el plazo, los tocoeños corrieron rumbo al camerino a cambiarse la pantaloneta.
Al regreso de los aceiteros, la cosa se puso peor, nuevamente la negociación se trabó. Las calcetas de ambos equipos eran blancas. Esta vez había otra dificultad, Real Sociedad no tenía de otro color.
Y los verdolagas no querían ceder, 'estamos en nuestra casa', dijo el capitán Berríos, 'ustedes no quieren', jugar alcanzó a decir Horacio Londoño. Pero el entuerto se terminó. Real Sociedad se cambió las calcetas, los verdolagas se las prestaron.
Cosas de la liga, una situación simple provocó un retraso de 43 minutos. Falló la cuarteta arbitral en la revisión de indumentaria y luego la intransigencia de ambos clubes retrataron a la liga en una dimensión burocrática.
