Este viernes
22 de enero se cumplen 10 años desde que Kobe Bryant logró un hito completamente histórico: su partido perfecto,
aquel en el que le registró 81 puntos frente a Toronto Raptors.
14 unidades en el primer cuarto, 12 en el segundo, 27 en el tercero y 28 en el cuarto. Se trata de la segunda mejor marca individual en la historia de la NBA después de los 100 puntos que anotó Wilt Chambelain en 1962.
En aquel partido mostró la mejor versión de Kobe justo en la mitad de su carrera (su debut en la liga se produjo una década antes, en 1996, y se retirará una década después) pero no vino solo, llegó acompañado de otras actuaciones estelares en un mes de enero del año 2006 en el que alcanzó una media de 43.4 puntos en 16 partidos.
Muchos se preguntaron tras el partido de los 81 puntos, qué hizo Kobe para jugar a tan alto nivel. Pues el propio jugador contó la historia.
La noche anterior al partido ante Toronto del 22 de enero de 2006, el escolta celebró el tercer cumpleaños de su primogénita. Hubo invitados en su casa y todos cenaron pizzas de pepperoni y soda de uva. Al día siguiente, Kobe llevó a cabo su rutina habitual. Le dolía la rodilla así que le prestó atención a las molestias.
Foto: Diez
Los Lakers venían
de perder dos partidos consecutivos, uno ante Sacramento Kings, y otro ante los que se convertirían en sus verdugos en la primera ronda de los playoffs de aquel año: Phoenix Suns. Existía una necesidad de victoria y Kobe salió muy motivado para el juego ante los Raptors en el Staples Center. Sin embargo, hubo en detalle dietético que engrandeció más todavía el récord del lagunero.
'Celebramos el cumpleaños de mi hija el día anterior y todos comimos pizza pepperoni y soda de uva. Me dolían las rodillas. Antes del partido me comí una hamburguesa y unas patatas fritas. No es broma', afirmó Kobe el pasado miércoles, después de caer ante los Kings.