El infierno de un hondureño en Cuba

Como una irresponsabilidad calificó don Manuel Escobar, padre del luchador hondureño Brandon Escobar, el hecho que el Comité Olímpico Hondureño lo mandara a prepararse a Cuba para luego abandonarlo en un hotel donde pasó sin entrenarse.

El angustiado padre estuvo al borde de las lágrimas cuando narró a Diario DIEZ la odisea que vivió su vástago en Cuba. Dice que su hijo le suplicó: “papi yo me quiero ir, ya no aguanto más”. Brandon se clasificó directo a Londres 2012 al ganar la medalla de plata en el Panamericano de lucha 55 kilogramos que se realizó en abril, en Orlando, Florida.

“No voy a hablar mal del pueblo cubano, lo pudieron llevar a Olancho, mientras le dieran comidita a tiempo, eso era lo de menos, pero lamentablemente no le dieron la asistencia que merece un deportista que va a poner el nombre de Honduras en alto”, dijo muy molesto don Manuel.

Sigue narrando la odisea del luchador: “Estuvo primero sin poder ir a comprar chicles y galletitas a la tienda de la esquina. La comida no era la adecuada, no tengo detalles si le daban la comida en el hotel o en otro complejo, no sé”, contó a DIEZ desde Estados Unidos.

“Inmediatamente cuando me enteré del caso le mandé 250 dólares desde Nueva York, luego me llamó le dije que estuviera tranquilo, volvió a llamar enojado porque tenía que regresar a Honduras el 30 de abril y me expresó -Papi, estos bárbaros dicen que me tengo que quedar otro mes más, yo no me puedo quedar”, siguió don Manuel.

Estuvo desde el 12 de abril hasta ayer 10 de mayo en Cuba y durante 28 días solo practicó el día que llegó con su entrenador personal, después tuvo que entrenarse solo durante 26 días.

Para conseguir una llamada con su familia tuvo que hacerla de traductor con unos norteamericanos para que le prestaran el teléfono satelital.
Su tía, Sheryl Solórzano, comentó que para ellos como familia fue terrible lo que le pasó a Brandon. “Tuvimos una semana sin poder comunicarnos y logró hacerlo porque habla inglés, un turista le prestó el teléfono y nos contó todo lo que pasó”, relató.

La comida con la que se alimentaba en el hotel no era la adecuada. El menú de un atleta es proteínas, pollo, carne de res y Brandon comía solo arroz.