Después de dos horas y 49 minutos de partido (77 minutos el primer set), Nadal cerró su pase a semifinales a las 1h30 de la madrugada parisina. Nunca antes en la historia de Roland Garros un partido había concluido tan tarde.
Sólo dos victorias ya separan al mallorquín de su título número trece sobre la arcilla parisina, lo que le permitiría igualar al suizo Roger Federer como el tenista con más 'grandes' en su palmarés.
Bien entrada la noche de París -debido a las más de cinco horas que precisó Schwartzman para deshacerse de Dominic Thiem- Nadal tuvo que esforzarse más de lo esperado, sobre todo al inicio, para superar a un debutante en el torneo de 19 años cuyo rostro imberbe era lo único que delataba su edad.
Sinner se permitió albergar la esperanza de convertirse en el tercer jugador en hacer hincar la rodilla a Nadal en París, pero la experiencia del español de 34 años se impuso para otorgar al español su 98ª victoria en Roland Garros.
'Gracias a todo el mundo que está aquí, es muy tarde, con estas difíciles condiciones hoy', dijo Nadal desde el centro de la pista nada más acabar el partido a los escasos 400 espectadores que aguantaron hasta el final.