La árbitra que se puso de moda y revela cómo actuaría ante Vinicius: "Han intentando ligar conmigo en pleno partido"

Conocé a una de las jóvenes silbantes que aspira llegar a la Liga Española y relata cómo actuaría ante un jugador con el comportamiento de Vinicius.

Carla García Alarcón es una joven de Barcelona que se ha popularizado por dirigir partidos en las categorías inferiores de España. La árbitra central de 21 años, que también puede hacerlo como asistente, estuvo como invitada en el podcast 'Lover Studios' y habló de todo lo que conlleva esta faceta a su corta edad.

Su gran afición era el patinaje, pero una lesión la apartó de su deporte preferido. Su padre, que era árbitro y que la llevaba al comité de colegiados, le transmitió su pasión y Carla decidió seguir sus pasos.

La silbante compagina sus estudios con los partidos, donde saca "un extra" para sus gastos, pero no le "daría para vivir". Asegura que desde su irrupción en los campos de fútbol, ha recibido mensajes de todo tipo de los jugadores.

"El hecho de ser chica, en muchos casos, ha hecho que me respeten más", afirmó la árbitra para luego responder si le agrada recibir piropos u otros comentarios desde la graderías.

"Me parecen bien mientras no se falte al respeto", subraya. "Si una madre dice 'qué guapa', no pasa nada. Otra cosa es el tono o las maneras. Soy chica, respeto el feminismo, pero tampoco hay que ser extremista", explica.

Carla García también destapa los mensajes que recibe a través de las redes sociales tras algunos partidos. "Ven el nombre completo en el acta y me hacen solicitudes por Instagram. También recibo mensajes como: tarjeta amarilla por la falta que me haces o eso no era falta (risas)".

Sin embargo, el sueño de la joven colegiada es dirigir en la Primera División de España a clubes como Barcelona y Real Madrid. Sobre todo porque los árbitros de esa categoría presumen de un salario decente.

"Los árbitros en Primera cobran muy bien, entre 100 y 200 mil euros al año", reveló la mediática árbitra. "No hay sueldo base y solo se cobra por partido", dijo en referencia a las categorías inferiores.

Ella ha estado en hasta cinco encuentros en un fin de semana. En cada uno de ellos gana entre 90 y 150 euros, en función de la categoría.

Durante la entrevista, le preguntaron cómo actuaría con un jugador del carácter de Vinicius: "Primero que todo intentaría hablar con él. Al final, haciéndome la chulita o chillando no se consigue nada. Intentaría por ese camino, y si no funciona con un tono más fuerte, tarjetas... si él no colabora, no se puede hacer nada".

Carla García también reconoció que "han intentado ligar conmigo en pleno partido" y confirmó que se hizo árbitra por su papá.

"Decidí ser árbitra porque mi padre también lo era y creo que eso inconsciente me influenció. Yo hacia patinaje y acompañaba a mi padre al comité de árbitros, y el delegado me decía que yo sería árbitra y por cuestiones de la vida me lesioné y decidí meterme al arbitraje", sostuvo.

"Quiero terminar mi carrera, además de poder llegar a Primera División española, subir cada año, combinar el trabajo con el fútbol e ir ascendiendo", cerró la colegiada.

Carla García ya cuenta con más de 30 mil seguidores en Instagram y por ahí suele compartir sus viajes y las imágenes de los partidos.