Tarzán se puso como ejemplo teniendo en cuenta su carrera en el conjunto culé en donde pocas veces veía una papeleta de los réferis. Además determinó su estilo de juego como 'limpio'.
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'Yo tenía una forma de jugar -que todo mundo lo podía ver-, era duro, pero siempre de una forma limpia. Trataba de llegar siempre temprano al balón, alguna vez llegaba tarde pero mi intención era siempre no a hacer falta'.
Desde que Ramos llegó al Madrid en el 2005, ha acumulado 24 tarjetas en todas las competiciones. La última campaña en la que no fue expulsado en la temporada 2014-2015, según las estadísticas.