Luego del amistoso ante Guatemala (se perdió 2-1) jugado en la capital chapina, el futbolista hondureño viajó con la demás delegación a Honduras pero él se desmarcó en San Pedro Sula para cumplir con algunos eventos benéficos que tenía planificado.
En horas del lunes, Jonathan Rubio visitó la cancha del Sergio Amaya en esa ciudad y repartió más de 150 pares de tacos a los niños de las Ligas Menores, luego acudió al centro de Tratamiento del Cáncer Infantil en donde se comprometió a pagar el tratamiento de los niños que luchan con esta terrible enfermedad.
DIEZ, que le dio cobertura a ambos actos, le consultó al mismo jugador si no iba a tener problemas con su salida de Honduras, esto porque se avecinaba la tormenta tropical Iota, misma que hizo estragos en diferentes partes del territorio catracho y que de hecho, inundó el aeropuerto internacional de San Pedro Sula, el Ramón Villeda Morales.
'Dios quiera que no tenga problemas con mi viaje, el viaje es a las 6:00 de la mañana (martes), salgo desde Tegucigalpa, el aeropuerto Toncontín, espero que no hayan problemas porque necesito incorporarme al equipo', le dijo a DIEZ.
Lo cierto de todo es que Jonathan Rubio al final no pudo salir de Honduras, ya que el Gobierno decidió cerrar los aeropuertos por la tormenta tropical Iota. 'Creo que hasta el jueves podré salir del país', dijo de forma escueta el seleccionado hondureño.
El futbolista centroamericano estaba impaciente por incorporarse a su equipo, el Chaves de la segunda división de Portugal, ya que se aprestaba para debutar con la institución luego de reunir toda la documentación y declararse listo para sus primeros minutos con su nueva camiseta.