Liga Nacional

Consternación por el asesinato de dos jóvenes estudiantes cuando iban a jugar fútbol

Uno de los jóvenes era estudiante de medicina en la Universidad Nacional.

2016-07-09

Dos jóvenes estudiantes hondureños se aventuraron a jugar un partido de fútbol, como diversión, que nunca lograron cumplir porque apenas salieron de su casa y se toparon con la muerte.

La violencia en Honduras no cesa. Esta vez hay consternación en el país tras el asesinato de Derick Alexis Anariba Zelaya (26 años) quien tenía el sueño de ser médico, estudiaba en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Unah) y de su amigo Nery Cañadas de apenas 21 años.

El hecho se dio la noche del jueves anterior en el barrio Perpetuo Socorro de Comayagüela, ciudad vecina de Tegucigalpa, la capital de Honduras.

Según informa Diario La Prensa, ambos jóvenes salieron de sus casas para relajarse y jugar un partido a eso de las 9:30 pm. En el trayecto se dispusieron a esperar un vehículo que los transportaría hasta el campo y se detuvieron.

En medio de la calle, la muerte apareció tomando la forma de una camioneta Honda CRV de la cual se bajó un sujeto encapuchado con vestimenta militar, quien sin mediar palabras sacó un arma tipo fusil y empezó a disparar contra los dos estudiantes.

En un intento por salvarlos, ambos muchachos fueron trasladados a la sala de emergencia del Hospital Escuela Universitario (HEU), pero las balas fueron puntuales en su misión, los estudiantes perdieron la vida momentos después. En el fatal evento, una joven resultó herida, quien de milagro está con vida.

MENSAJE EN FACEBOOK

“Tu ausencia duele, pero tu recuerdo nos hará sonreír”, así dice una foto en el perfil de Facebook de Derick, quien era un estudiante alegre y noble de corazón, comprometido con su carrera y apasionado por su labor, ser médico era su misión en la vida.

Nery Cañada tenía un sonrisa contagiosa, era un joven estudiante, llevaba una vida tranquila y era aficionado de las motocicletas y participan en competencias.

Para sus amigos era el “Pez” y hoy quedará para siempre plasmado en sus recuerdos. Al igual que Derick, los mensajes en las redes sociales son dolorosos de leer, las despedidas nunca son alegres y menos cuando no son deseadas.