El Club Deportivo y Social Vida no deja de recibir malas noticias en este 2024. Su situación deportiva es crítica, pues han perdido sus cuatro partidos del torneo Clausura 2024 y son prinicipales candidatos a descender en la Liga Nacional.
No obstante, las complicaciones siguen llegando, pues la institución ceibeña, que sufre una crisis financiera, fue noticada en las últimas horas que perdió una nueva demanda y por ende deberán pagar una importante suma de dinero.
Se trata del caso del técnico Carlos Raúl Cáceres, quien salió de la institución teniendo contrato vigente junto a su asistente Óscar Ovidio Isaula. El Vida deberá abonar más de 300 mil lempiras a ambos entrenadores.
“La Comisión de Apelaciones de la Fenafuth resolvió el pasado 4 de febrero que, vistas las remisiones de incumplimiento de contrato enviadas por el Tribunal Nacional Arbitraje del Fútbol (TNF), en relación al incumplimiento por parte del Club Deportivo y Social Vida, que consisten en pagar a los señores Carlos Raúl Cáceres Hernández la cantidad de DOSCIENTOS MIL LEMPIRAS (L. 200,000,00) y Óscar Ovidio Isaula Arguijo la cantidad de CIENTO VEINTE MIL LEMPIRAS (L. 120,000,00)”, informa el comunicado.
”Así mismo se le impone a dicho club una multa de CINCO MIL LEMPIRAS (L. 5,000,00), por el incumplimiento de las decisiones del TNAF”, agrega el texto.
Cabe destacar que la Comisión de Apelaciones adivirtió al Vida que si no resuelve dicha deuda, comenzará a perder puntos de los que sume en el torneo Clausura 2024, es decir, no sumará sus respectivas unidades hasta que haga el depósito.
“Se aplicará la sanción de pérdida de los puntos que obtenga en sus partidos de carácter oficial, a partir de la notificación de la presente resolución, sanción que se mantendrá hasta que dicho club cumpla con las obligaciones económicas adeudadas”, manifestó la Comisión.
El Vida se encuentra en la zona baja de la tabla de descenso. Tiene 20 unidades y están a dos unidades del último puesto que tiene el Victoria con dos puntos menos (18 pts); en la próxima fecha es el clásico ceibeño.
