El Mundial es sin duda una de las grandes vitrinas publicitarias y cada cuatro años atrae a marcas en busca de una exposición masiva. Según la FIFA, la final del Mundial de Rusia-2018 en la que Francia ganó a Croacia fue seguida por 1.120 millones de telespectadores en todo el planeta.
Las camisetas de entrenamiento de la selección de Dinamarca lucirán “mensajes críticos”. Dos patrocinadores (Danske Spil y Arbejdernes Landsbank) han aceptado que se reemplacen sus logotipos.
La marca deportiva Hummel anunció este miércoles que disimulara su logotipo en la camiseta de Dinamarca, haciéndolo casi imperceptible, como “protesta contra Catar y por su balance en materia de derechos humanos”.
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Los costosos contratos a largo plazo y las campañas de comunicación sobre el Mundial iniciadas hace ya varios meses hacen que sea ilusorio pensar en un boicot de último momento, dice a la AFP Gary Tribou, profesor en marketing deportivo en la Universidad de Estrasburgo.
“Un boicot mediático (...) no sería eficaz”, estima el operador alemán Telekom, que es a la vez patrocinador de la selección de su país y difusor del Mundial, a través de su filial Magenta TV.
- Memoria selectiva -
La empresa prefiere apostar por un “acompañamiento crítico del torneo”, emitiendo por ejemplo reportajes sobre “las condiciones de trabajo de los trabajadores inmigrantes”.
Por su parte, el gigante estadounidense Coca-Cola publicó en mayo un largo comunicado para defender su presencia en Catar, afirmando haber realizado presión sobre la FIFA para contribuir a “reformas significativas para mejorar los derechos de los trabajadores migrantes”.
El riesgo de “bad buzz” (mala publicidad incontrolable) siempre es posible durante el torneo, pero la experiencia muestra que a menudo los hinchas tienen memoria selectiva.
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“El escándalo se evapora rápido en la mente de la gente”, considera Gary Tribou, que señala un cierto riesgo, el de audiencias decepcionantes para la competición en caso de un boicot masivo de los hinchas-consumidores.
Los difusores preguntados por la AFP aseguran que el mercado publicitario en torno al Mundial sigue siendo robusto: “Hemos registrado hasta el momento una fuerte demanda, comparable a la del Mundial de 2018 y a un nivel de precios similar”, subraya la cadena alemana ARD, mientras que su homóloga británica ITV habla de una “demanda fuerte”.