El técnico argentino de Cartaginés, Andrés Carevic, mostró un tremendo enfado con sus jugadores durante el medio tiempo del partido contra Motagua, disputado en el Estadio Nacional de Tegucigalpa.
A pesar del empate sin goles que se mantenía en ese momento, el estratega decidió reunir a su equipo en la cancha para darles un regaño contundente que reflejaba su insatisfacción con la actitud y el rendimiento en la primera mitad.
No obstante, el regaño iba dirigido hacia el hondureño Jesús Batiz por desaplicaciones tácticas. El malestar del sudamericano con el catracho fue desairoso y desagradable que hasta el Bambino Pons, reconocido narrador de la cadena ESPN se mostró sorprendido y lamentó la postura de Carevic.
El timonel de los brumosos no se mostró complacido con la forma en la que Batiz y sus compañeros estaban manejando el partido y les exigió mucho más, recordándoles la importancia del partido y del ahorro que trajeron de Costa Rica para buscar la clasificación a la Liga de Campeones de la CONCACAF.
El entrenador argentino fue puntual en señalarle a Batiz sobre los malos cierres que estaba haciendo y que no estaba concentrado en su labor dentro del campo. Los jugadores respondieron a la exigencia de Carevic con una actitud calmada y viéndolo fijamente ante su enojo.