Según ha explicado este viernes el periódico Folha de Sao Paulo, la póliza que esta empresa contrató posee algunas cláusulas que le eximirían del pago de una millonaria cifra.
Las dos cláusulas que menciona es en caso negligencia del piloto u omisión del operador, en este caso Miguel Quiroga por no seguir un plan de vuelo para reabastecerse de combustible.
En este caso Folha maneja que la negligencia ha sido el error de cálculo de combustible que hizo el piloto de Lamia y es una hipótesis que se reforzó el jueves cuando las autoridades de Aereonáutica Civil de Colombia afirmaron que el tanque de combustible del avión se encontraba vacío.
Sobre los seguros, Folha informa que LAMIA firmó con la aseguradora Tokio Marine Kiln y tendría valores irrisorios para los estándares del sector aéreo.

Momento en que el futbolista Helio Neto era rescatado por cuerpos de socorro colombiano.
Sin embargo, la poliza de seguro de la compañía encargada que trasladaba al Chapecoense era de apenas 25 millones millones de dólares.
'Con esta cantidad, no habrá suficientes fondos para cubrir los daños. Sabemos que lo más importante para las familias es ahora la repatriación de sus seres queridos y el dolor que están sintiendo. Brasil y Bolivia tienen que presentar una solución urgente', señaló el abogado de acuerdo con el diario peruano El Comercio.
Bolivia se encuentra entre los 140 países en el mundo que se responsabilizan de los accidentes aéreos y deben pagar como mínimo unos 170 mil dólares a cada familia.

Medicina Forense de Colombia ya hizo el reconocimiento de las 71 personas que fallecieron.
Expertos en el caso consideran que los familiares de las víctimas deben iniciar un juicio contra Lamia aunque ven difícil que esta empresa tenga liquidez suficiente para hacerle cargo a la cantidad de dinero que deberían pagar.
Por su parte, la aseguradora contratada por el club deberá desembolsar cerca de 2,5 millones de reales (700 mil dólares) para cada familia, un monto calculado al multiplicar por 28 el salario de cada atleta.
Para la Confederación Brasileña de Fútbol el valor establecido es de de 1,1 millones de reales para cada familia, 12 veces el salario de cada jugador: serían 279 mil dólares para cada familia.

Los cuerpos de las víctimas han comenzado a ser repatriados a Brasil.