Barcelona firmó una épica remontada ayer para derrotar al Celta (4-3) cuando solo restan seis jornadas para el cierre de LaLiga. Sin embargo, tres jugadores del equipo mostraron su frustración contra el Hansi Flick y las imágenes se han viralizado por las redes sociales.
"No puedo decir si jugará de inicio o si tendrá minutos en los próximos partidos, pero ahora, tal y como se está entrenando, está a un nivel mejor que antes. No es una situación fácil para él", fueron las palabras de DT hace unas semanas para referirse al presente de Ansu Fati.
Tras su ingreso en la Champions League en la ida contra Borussia Dortmund y por pedido de Lamine Yamal, Ansu no volvió a ver minutos y evidentemente no soporta más las formas del técnico alemán.
El Barcelona perdía 1-3 ante Celta, y para remontar el encuentro, Flick decidió mover el banquillo. Hizo los cinco cambios posibles y Fati no fue tomado en cuenta. Los primeros en entrar fueron Lamine y Olmo, luego Gavi por la lesión de Lewandowski y por último Eric García y Pau Victor.
El estallido de Ansu se da cuando Flick decide al 88' realizar las últimas dos sustituciones al mismo tiempo: Eric y Pau Victor. El atacante había calentado todo el segundo tiempo, tenía expectativas de ingresar y no fue posible.
Al ver el doble cambio de Flick, Fati lanzó la pechera verde y comenzó a las patadas contra el banquillo. Se descargó con los asientos de la primera fila y después se fue al fondo a desahogarse.
En los minutos finales del encuentro, Ansu no se movió de su asiento y apenas celebró el triunfo. Por su parte, Flick ingresó corriendo al campo para abrazarse con Raphinha y felicitar a todos los jugadores que dieron vuelta el resultado.
Pero eso no es todo. Ferran Torres y Héctor Fort también se disgustaron con su técnico por sacarlos del partido. El 'Tiburón' pateó el aire y se le vio enfadado tras ser reemplazado por Dani Olmo.
En otra imagen, Flick se acercó a Héctor Fort cuando terminó el compromiso para darle un abrazo o un apretón de manos, pero el joven, visiblemente frustrado, se marchó sin involucrarse y se dirigió directamente al vestuario.