Liga Nacional
2013-04-24
Ahora tiene 46 años, pero es el mismo tipo de siempre, eso sí, convertido actualmente en todo un hombre emprendedor. Del Vivian Rodríguez árbitro solo han quedado recuerdos y un par de álbumes en casa.
Su vida después del arbitraje no es más que una película en su memoria que se estrenó, fue top y luego quedó en el archivo, marcado, incluso, por algunos golpes en su nariz...
De Vivian Rodríguez se cuentan muchas historias. El día de su retiro lo hizo sin mucho aspaviento. Fueron 13 años cargados de muchas vivencias, a la vez de muchas polémicas.
Ese era Vivian, el tipo que ahora nos confiesa cuál es el equipo de su corazón, y que además, admite algunos errores que cometió en su carrera.
“Después de mi retiro, ahora me dedico en el área de ventas de productos de mantenimiento industrial. Decidí formar mi propia empresa junto con mi esposa”, dice.
Su retiro no lo meditó. “Fue después de un clásico Olimpia-Marathón, en la primera vuelta, recuerdo que salí del juego, pasó una semana, la siguiente y no volví a ser nombrado, jamás pregunté por qué y tampoco me llamaron para darme explicaciones, y fue cuando decidí retirarme, además, no me gustaban algunas cosas que se estaban dando”.
Nunca se arrepintió. “Me metí tanto de lleno que quedé satisfecho, para muchos hice una buena labor, para otros un mal trabajo, pero en mi interior estoy muy feliz, contento...”. dijo.
LA AGRESIÓN DE UN PORTERO CHILENO
Vivian era sinónimo de polémica cada vez que dirigía. Y si hay momentos que jamás olvida es aquel que vivió en 2001 cuando el arquero Marcelo Ramírez lo agredió en un amistoso Honduras-Chile.
“Recuerdo que me puso las manos en el pecho y me empujó, estaba mal parado, quizá porque la cancha estaba húmeda, me fui hacia atrás y no me pude detener”.
Pero hace dos años, el chileno se disculpó. “Me llamó desde Chile. Él me dijo que había sido una ligereza de su parte y se alegraba que yo estuviera bien”, contó.
EL CARRO QUE LE DESTRUYERON
También no olvida aquel incidente donde destruyeron su carro en Puerto Cortés. “Fue una dura experiencia porque no lo creía, nunca me había sucedido eso. Para ese juego me di cuenta que cometí un error, pero no fue mi intención, sino que las posibilidades que tenía eran mínimas para tomar una decisión y tomé la incorrecta”, admitió.
¿Recibió amenazas en su carrera? “No, lo hubiese denunciado. Igual, si me preguntás si me ofrecían dinero, también en ese momento lo hubiese denunciado, pero nunca pasó, jamás”.
Rodríguez toma con tranquilidad cuando le llaman un ex árbitro polémico. “Cuando te toca tomar decisiones, siempre vas a crear polémica, por eso me llamaron así, pero en el fondo, mis decisiones siempre fueron apegadas al reglamento”.
Partido donde iba Vivian, partido polémico, eso es algo que según Rodríguez “me costó mucho mi carrera, porque el jugador lo entendía en el campo, primero probaban mi valor, mi valentía, para ver cómo estaba. Había jugadores líderes para mal, muchos quisieron sacar ventaja, pero nunca lo permité, aunque sabía que me iban a llover las críticas”.
Incluso, no le importa que en su carrera haya sufrido agresiones, “fueron cosas que pasaron, nada de resentimiento. Siempre fui un árbitro respetuoso, si no pregúntele a los jugadores cuántas veces los insulté”. En el fondo, Vivian está tranquilo porque siempre dio lo mejor que tenía para el arbitraje.
Y para rematar, el ex réferi nos confesó el equipo de sus amores. “Soy Marathón, incluso voy al estadio con mi hija”, aseguró.
¿Se pone la camisa de Marathón? “No, eso no, por respeto al gremio por lo que fui como árbitro. Antes de ser réferi me gustaba Marathón, ya en el arbitraje era otra condición, era diferente, imparcial”.
¿No había corazoncito? “No, el mismo problema daba el Marathón, Motagua, Olimpia, Real España, porque ellos van por sus resultados”.
La entrevista había finalizado, pero no lo pudo hacer sin esta frase que sintetiza su antes y su después: “En mi casa no hay pelotas de fútbol, no hay retratos, lo que me dieron a mí yo se los entregué a otros que venían atrás. No guardo nada, los recuerdos están conmigo, soy feliz”.
ALGO MÁS
El arbitraje: “Me dejó muchas experiencias, luego una formación como persona”.
¿Se arrepiente de algo? “No, siempre lo hice con una conciencia tranquila”.
Una tristeza: “No haber pitado partidos de eliminatoria, mundiales, porque trabajé para eso, pero siempre se negaron”.
Un amigo: “No tuve grandes amigos, sí gente que me aconsejaba”.
EN UN MINUTO
¿Perjudicó algún club en su carrera?
Para nada. Eso lo asimilé bien, apegarme al reglamento era la base de todo.
¿Por qué admite ser Marathón?
No sé por qué, muchos lo esconden, hay que ser transparentes en esta vida, y si traté de hacerlo en el campo, pues fuera del mismo hay que ser igual.
SU PERFIL
Nombre: Vivian Antonio Rodríguez Reyes
Edad: 46 años
Estado civil: Casado, tres hijos.
Religión: católica
Nació: El Progreso, Yoro.
Su carrera comenzó en 1990 dirigiendo en fútbol amateur, torneos de Copa hasta que llegó el gran salto en 1995.
ADEMÁS
¿Después de todo, usted va a Cortés?
“Pasaron tres meses para que volviera, claro, ya no lo hice en mi carrito marca Camry, que me destruyeron. Me decían, no vayas que esa gente está enojada, al final lo hice por mi trabajo”.
¿Si hoy tuviera 30 decidiría volver a dirigir?
“Yo creo que en estas situaciones ya hubiese renunciado, porque no estuviese feliz con lo que se está haciendo. Ya días que no se están haciendo bien las cosas”.
¿Le gustaría que le hicieran un homenaje?
“Me retiré en el anonimato porque así entré”.