Los azules salieron con el cerebro lavado que un triunfo les ponía con media tarjeta de invitación a la fiesta de semifinales.
Así se fueron desde los primeros minutos cuando un tiro de esquina cobrado por Santiago Vergara que cabeceó Samuel “Chama” Córdoba quien además chocó con John Bodden para hacerse el harakiri y poner el 1-0 del encuentro a los 4 minutos.
En esa jugada, Bodden perdió el conocimiento y tuvo que irse directo al hospital pero afortunadamente alcanzó a recuperarse, pero le dio paso al suplente Denovan Torres.

Bodden chocó con su propio compañero y fue enviado al hospital.
De un contrapié a otro. Así funcionaba la dinámica del juego, Motagua hacía el despliegue con la intención de agarrar con el pantalón abajo a su rival, como a los 40 minutos cuando Erick Andino hizo un desborde por izquierda, mandó la línea pero nadie contestó.
Motagua hacía méritos para mantener el marcador a su favor y así se marcharon al descanso.
EL DESENLACE
El script estaba tornado de color azul. Pero Marathón no se quedó en sus trincheras y tenía que vender cara la derrota. Con 55 minutos en el cronómetro, dos genios se juntan.
Mario Berríos como siempre incisivo para el Monstruo, sacó un pase con sello platinum y de derecha la filtró a Diego Reyes quien estiró su pierna derecha, le ganó la posesión a Henry Figueroa y definió sin problemas para darle esperanzas a su equipo.

Fue así como Marathón fue enredándose en su madeja para que Motagua sacara provecho y a los 90 minutos, con la agonía del reloj, Félix Crisanto se juntara con Reinieri Mayorquín para sacar un sablazo fuera del área y con la complicidad de Eder Munive colocar el 2-1 que le da media semifinal al Motagua.
REPASA EL MINUTO A MINUTO DEL JUEGO MARATHÓN-MOTAGUA