La Real Sociedad se convirtió en uno de los conjuntos más sólidos y de los que mejores juegan. Llegó a tres finales y en este torneo que se está disputando todo apunta a la cuarta.
Le tocó jugar finales ante Motagua, Olimpia y Real España, ante este último estuvo muy cerca de consagrarse.
Lo importante en este caso es destacar que con un equipo eminentemente hondureño, sin un gran presupuesto, está siempre señalado como uno de los rivales más fuertes de la liga.
Desde Jairo Ríos, pasando por (Héctor) Castellón, (Horacio) Londoño y hoy Mauro Reyes, todos, sin excepción, manejaron un estilo de juego de equilibrio y profundidad, es decir de proponer en vez de especular.
Es por eso que hoy me da bronca observar cómo despotrican con el conjunto de Tocoa.
Muchos se atreven a decir que jugar ahí es complicado y hasta cierto punto hostil. Que amañan o arreglan partidos, que los arbitrajes son manipulados. En fin, cero crédito a una institución que está haciendo las cosas muy bien.
No me parece justo que lo tilden de tantas cosas. ¿Ustedes creen que se puede llegar a tres finales así por así?
Y si de verdad existen estas cosas, ¿por qué entonces nunca se coronó campeón? Creo que es el momento de darle los méritos que se merece.
No en vano hoy está en la segunda posición a un punto del Olimpia. Yo creo que más que castigar a la Real Sociedad, es el instante en el cual se debería de alabar.
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Es más, este equipo está poniendo en evidencia las carencias de los otros cuadros:
1. Juega bien, a veces muy bien.
2. Cuando juega de visitante no es temeroso.
3. En una cancha mala, (porque hay que decirlo también) como la de Tocoa, siempre respetan el buen trato de balón, es más, estoy convencido de que en un terreno aceptable luciría mucho mejor, es decir juega contra sus propios intereses en esa cancha.
4. Nunca se escuchó hablar de deudas al plantel.
Por esto y mucho más, hoy por hoy y desde hace ya bastante tiempo, la Real Sociedad es uno de los mejores equipos de Honduras, les guste o no y les duela a quien les duela.
Hasta la próxima.