Pablo Lavallén es entrenador de fútbol, y así lo deberíamos de considerar siempre, porque aquello que hace realmente grande a los entrenadores es su conocimiento y su capacidad para para transmitirlo.
A los futbolistas, les motiva ser entrenados por personas que no solo sienten simpatía por ellos, pero por aquellos que pueden aportarles más cosas a ellos en su profesión; eso es ser un deportista de alto rendimiento.
En lo más alto del profesionalismo, el entrenador de fútbol debe educar. Los entrenadores son educadores por naturaleza y convicción, deben saber transmitir mediante pedagogía los principios que componen su modelo de juego.
En Pablo Lavallén hay un educador futbolístico, alguien que llega al Olimpia en el tiempo indicado y en el momento preciso. El Olimpia con tantos futbolistas formados para interpretar el juego de forma diferencial, donde se educa en aquellos principios básicos de la técnica y del juego, Lavallén seguramente encontrará una mejor recepción de su mensaje.
Es importante que Lavallén, observe el contexto olimpista y conviva con el entorno del club para poder incorporar la cultura del mismo a su modelo de juego, un entrenador que respeta el juego, que desea el balón para que sus equipos sean protagonistas y que tiene la necesidad imperiosa de jugar bien; eso hace que encaje en el perfil histórico de entrenadores del Olimpia.
Lavallén de reconocida escuela lavolpista tiene un gusto muy marcado por el juego asociativo, potenciando a equipos e individuos dentro de su modelo de juego, el último caso fue Colón de Santa Fe, un equipo que era dirigido en el campo por Luís Rodríguez, El Pulga, futbolista con una capacidad de inventiva superiora.
En Olimpia se encontrará con una base de mediocampistas formados bajo la idea de educarse en el juego. Lavallén tendrá en sus futbolistas los recursos técnicos para hacer mejor su idea de juego.
Será hasta otro lunes que nos leamos, hasta pronto.
Twitter: gasparvc_
