El equipo dirigido por “Bolillo” Gómez realizó esta tarde de sábado un regenerativo en una cancha privada de San Pedro Sula, las instalaciones de la escuela Happy Days Freedom, con más intensidad para los futbolistas que no vieron acción o ingresaron de cambio ante los canaleros. El resto hizo algunos trabajos especiales para bajar las cargas del intenso juego.
Los rostros de los jugadores tenían borrada la sonrisa. Nadie hablaba y sólo algunos de ellos saludaron a la prensa con la mirada y un movimiento de cabeza. El grupo está deprimido.

Cuando ya los jugadores se habían puesto la indumentaria, vino la extensa charla del Bolillo. Se puso a escuchar uno a uno a los jugadores. Cada uno dio su punto de vista del día después. El primero en hablar fue Maynor Figueroa al que le pidió la palabra el colombiano.
El sudamericano hacia gestos con las manos y enumeraba con los dedos para luego pedirle palabra a otros futbolistas. Atrás estaban todos los asistentes que solamente ponían atención y solo 'Bolillo' se dirigía al pelotón.
VER: Maynor Figueroa, el hombre de hierro y capitán de Honduras que cierra un ciclo soñado en la Selección Nacional
Viendo a la cara a los futbolistas por más de media hora en sus dirigidos, Bolillo les enumeró lo vivido anoche en el Olímpico. Alex López hablaba y todos lo escucharon. Pero luego volvió a hablar Maynor Figueroa que con mucho sentimiento se dirigió a sus compañeros.

Cuando terminó la charla el capitán, Bolillo aplaudió y les dijo: 'Vamos que vamos, arriba muchachos'. El trabajo consistió en táctico, poco físico porque el equipo hizo esas prácticas durante la semana.

Para el duelo del martes, “Bolillo” tendrá que hacer variantes obligadas en el 11 titular para buscar una mejoría. No se descarta que Denil Maldonado aparezca para reforzar la zona baja. En el centro del campo podría jugar Edwin Rodríguez en lugar de Alexander López y en ataque se potenciaría con la presencia de Romell Quioto que anoche no estuvo frente a Panamá.
