Y es que después de reinar en la cima del boxeo como el luchador más dominante durante los últimos años, muchos esperaban que el ucraniano lidiara sin mayores dificultades ante López aquella noche donde se vieron las caras en un enfrentamiento que inificaría los títulos de los pesos medianos.
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Sin embargo, más allá del favoritismo en la previa, para los expertos y jueces del combate, López terminó superando a Lomachenko de principio a fin y se quedó con los cinturones y la victoria de forma unánime.
Para el campeón mundial en tres categorías diferentes la derrota es algo que marcó su carrera, su récord, su ego, ya que antes del combate era para muchos, la gran mayoría, el mejor libra por libra del planeta. 'Loma' peleará este sábado 27 de junio contra el japonés de 32 años, Masayoshi Nakatani (20-1, 12KO), en lo que será su primera pelea después de la derrota contra López.
En la conferencia previa a la pelea que tendrá lugar en el Virgin Hotels de Las Vegas, Lomachenko fue consultado sobre una revancha contra Teófimo, a lo que contestó: 'Tengo una batalla este sábado por la noche (...) Después podemos discutir una revancha, después de todo, el mundo lo sabe, me gustaría esta batalla una vez más'.
Sin embargo, antes de pensar en reencontrarse con su némesis primero deberá vencer en un muy difícil combate a un gran Nakatani que viene de vencer por nocaut técnico al boricua Félix Verdejo, y que sin duda representa una gran amenaza.
Curiosamente tanto Lomachenko como Nakatani tienen algo en común además de la división de las 135 libras; y es que el ucraniano como el japonés cayeron ante Teófimo López. La batalla contra el Nipón le permitió a López convertirse en el aspirante oficial al título mundial de la IBF que posteriormente ganaría y conllevaría la lucha contra el hasta entonces campeón indisutible, Lomachenko.
